La Consejería de Fomento está ejecutando la sustitución de las horquillas ubicadas en el puente de acceso a la barriada Bermudo Soriano ‘La Encrucijada’, por unos “elementos más adecuados para la finalidad que requieren”, según explicaba a El Faro el consejero del área, Néstor García. Una finalidad que no es otra que la de impedir el paso de vehículos y motocicletas a la explanada del barrio.
Estas horquillas se colocaron hace un año con el objetivo de evitar que las motos circularan por la amplia explanada, con el riesgo que ello implica para los vecinos y, especialmente, para los niños que juegan en la zona. “Entran y hacen caballitos en un lugar donde pueden atropellar a alguien. Precisamente cuando han quitado estos elementos algunas motos ya han empezado a entrar en la plazoleta”, se lamenta el presidente de ‘La Encrucijada’, Domingo Ayora.
El problema finalizará en el momento en que termine la instalación de los nuevos elementos que García estima que “será el lunes como plazo máximo”.
Al margen de esta cuestión, Ayora lamenta que hay problemas graves en la barriada que no están siendo atendidos, pese al riesgo que supone para los vecinos. El más relevante es la reparación de los puntos de alumbrado, cuyos cables a la vista de todos suponen un grave riesgo, especialmente para los más pequeños. “Ya es hora de que vengan a arreglar esto porque los cables están fuera desde hace tres años y medio y están cubiertos de agua después de las fuertes lluvias. ¿Van a esperar que ocurra una desgracia para que lo reparen?”, se pregunta Ayora. Al margen del peligro que ello implica, la explanada está a oscuras por la falta de puntos de luz.
Otra de las quejas que reiteran continuamente se refiere a la inundación de los portones debido a un problema en la construcción de la explanada. “Los portones están por debajo de la plazoleta por un error de Fomento al edificar la plazoleta y el agua de lluvia termina en las fachadas. El último temporal ha vuelto a inundar la entrada a las viviendas”.
Finalmente, Ayora pide que se vuelva a poner en marcha la Ciber-Biblioteca, paralizada tras pasar a depender de la Federación Provincial de la Asociación de Vecinos y en la que se llevaban a cabo actividades extraescolares para niños de distintas barriadas.