Los informes que tengo en lo alto de mi despacho no son nada halagüeños. Me han dado centenares de recopilaciones de datos sobre un tema muy incandescente que tuvo su culminó en la visita de un alto cargo político a Ceuta hace pocas fechas. Nuestra perla del Mediterráneo está situada en un punto estratégico, ya que es un pequeño salto entre dos continentes. Esto es evidente además de añadir que las culturas que separan también son muy extremas. España estuvo durante unos años recibiendo migrantes de todos los lugares del planeta. Los más conocidos para la opinión pública fueron los sudamericanos y los subsaharianos. Las formas de entrar en territorio español eran por tierra, mar y aire. Es decir muy complejas de explicar. Los inventos de las organizaciones internacionales eran muy técnicos ya que explotaban los defectos de la legislación española que la teníamos y la seguimos teniendo muy mal enfrascada para nuestros intereses como ciudadanos españoles. Lo primero que me viene era que nuestro censo era inferior a una cantidad para poder recibir más ayudas de los fondos europeos.
De ahí venía la primera dejadez por parte de nuestras autoridades. Cuando se alcanzó los objetivos ya era tarde de reaccionar en plantar cara a ese desmadre que tenemos encima de la fácil entrada en nuestro territorio. Comprendo que al ser tan modernos pues las expulsiones van en contra de los intereses de los tribunales internacionales en favor de la ayuda de todos nuestros hermanos humanos. Pero señores, ¿no debe de ser el primer mandamiento de velar por las barrigas de nuestros ciudadanos españoles?
Nuestra comunidad sufre un lastre muy evidente en las calles, es el paro obrero. Mientras que tengamos está tara sólo debemos de meditar las acciones que nos ayuden en revocar este menester. Ya que lo primero que tenemos que mirar es por nuestros intereses. Y si luego podemos ayudar a los demás pues para eso somos también solidarios. Las primeras oleadas de entradas en Ceuta de personas sin autorización administrativa fueron por los años 98 aproximadamente. Esta sorpresa hizo a nuestras autoridades primero agrupar a estos nuevos colectivos en lugares de la frontera con Marruecos cercanos. Lo que se les llamo asentamientos. Hasta que se improvisó unas tiendas cedidas por los militares en un lugar de Ceuta por la zona de Calamocarro. Fue una forma de ocultar la mala gestión de nuestros políticos. Y he dicho bien. Pues debemos de pensar que cuando tenemos una crisis que afecta en primer lugar a Ceuta, luego indirectamente a España y en el futuro a Europa se deben de poner en marcha los resortes de comunicación internacionales para minimizar el problema que cada parte tenga.
Los convenios internacionales se deberían de haber puesto en lectura de inmediato por parte de nuestros grandes pensadores y no dejar apartado el problemón que todavía nos lastra. Culpa la tienen nuestros asesores políticos que no fueron capaces de ver en su bola de cristal en el problemón que estábamos metidos. Mientras tanto los sillones europeos viendo que los problemas de España estaban muy lejos de sus fronteras no les hacían ni caso. Hasta hace pocas fechas que asignaron unas partidas económicas para ayudar en implantar tecnología en nuestras fronteras. Bien, más vale tarde que nunca. Pero viendo está dejadez por parte de nuestros aliados europeos no debemos de entrar en jugadas por parte de nuestros amigos.
Recordad recoger más personas que no la querían admitir otros pueblos europeos. Comprendo que son seres humanos pero no tenemos suficiente con nuestros problemas para meternos en otros añadidos. Nadie quiere a estos migrantes ni los que vienes a través de Marruecos ni de ningún sitio del norte de África. No deberían de entrar ninguna organización no gubernamental en decir como un gobierno tiene que administrar justicia ante una invasión pacífica. Yo les daría dinero para que estos desplazamientos fueron abortados desde sus territorios de origen dándole lo que les falta. Lo primero los alimentos, medicinas, y resguardo para que no se tengan que desplazarse de sus lugares de nacimiento. La política vale para este menester y nuestros cascos azules también pueden actuar como ayuda humanitaria. Pero esto es pensar con la cabeza cosa que en este lugar no se hace mucho. Y yo añado, ¿cuándo se hará factible este razonamiento?