Ha sido una noche dura en Marruecos. La aproximación de grupos de jóvenes hacia la frontera de Ceuta ha llevado a un despliegue nunca visto con fuerzas de seguridad de todo tipo.
A pesar de los controles que se estaban haciendo en carretera, detectando grupos y registrando vehículos, decenas y decenas de personas desplazadas desde distintos puntos del sur lograron llegar hasta barrios de Castillejos y emprender ruta hacia Ceuta, siguiendo muchos de ellos las zonas de monte.
Ha habido incidentes, apedreamientos, enfrentamientos y detenciones. En Ceuta, las fuerzas de seguridad estaban a la expectativa de intervenir si se producía la entrada de personas en grupo.
Hubo estrecho celo en el perímetro, ante la sospecha de un salto de valla, y apoyo de helicóptero.
Lo grave, las situaciones más complicadas han tenido lugar en Marruecos, en donde incluso los vecinos de Castillejos se han enfrentado a quienes llegaban a las bravas a sus barrios provocando disturbios.
Esto se ha interpretado como un reto: llegar a Ceuta sí o sí. En los foros en los que difunden los vídeos alentando el pase se animaba a seguir y a enfrentarse si era necesario.
Marruecos tiene un gravísimo problema ante la pérdida de autoridad y el levantamiento de jóvenes. ¿Hasta cuándo puede mantener el blindaje que ordenó en la tarde del viernes, pero que lleva ejecutándose desde días atrás?
La duda está en lo que podrá hacer, ya que los mensajes difundidos en redes siguen. Si ha fracasado el pase del 15S habrá más.
Los participantes en el intento de entrada a Ceuta llevaban piedras y no dudaron en hacer frente a los dispositivos de seguridad ordenados en frontera y montes.
Al despliegue visual se ha sumado el de agentes de paisano desplegados en varios puntos, por ejemplo en la estación de tren de Tánger, en donde esperaban en la noche de este sábado en las puertas de los vagones de los convoyes provenientes de Rabat para identificar a jóvenes sospechosos de querer participar en el cruce a Ceuta.
Los agentes arrestaron a decenas de ellos de un solo tren, y hasta a diez de un solo vagón, tanto marroquíes como personas de origen subsahariano, y los trasladaron a un edificio de la estación.
Estas detenciones se producen coincidiendo con el llamamiento masivo de entrar a Ceuta convocado para este domingo por redes sociales, con mensajes con frases como "quedamos el 15/09", "ojalá el 15/9" o "15/9 Fnideq-Ceuta", acompañados de imágenes del mar o vistas de Ceuta desde Castillejos.
En carretera también se han llevado a cabo, en cafeterías y hoteles o hasta en casas de alquiler.
Las imágenes grabadas en videos recogen la unidad de los participantes, unidos para emprender la carrera y superar los controles.
Iban todos en bloque después de haberse desplazado desde puntos del sur.
En plena frontera Marruecos tenía varios autocares preparados para cargar a los detenidos y llevarlos del lugar, como así hizo durante la noche.
Se vivían escenas emotivas de madres que se acercaban buscando a hijos que habían marchado de casa sin su consentimiento.
Marruecos se enfrenta a un gravísimo problema social ante la fuerza de unas redes sociales con capacidad de arrastrar a niños que deberían empezar el curso escolar pero terminan atraídos por las falsedades difundidas.
El dispositivo organizado frenó las entradas pretendidas, pero dejó grietas que permitieron que grupos llegaran hasta el norte.
Se les veía por la carretera, metiéndose por los montes para no ser detenidos en controles. Fue así como lograron aproximarse al cruce.
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