No me toque los nervios

La gente anda cabreada y con razón. Yo, que saben que no gasto de telebasura más que por suprema necesidad, ayer alucinaba.. Debatistas serios donde los haya apenándose por la pérdida del nieto de la Pantoja.   Que se mueren los negritos en África de hambruna, qué les den morcilla, que nos morimos nosotros con trabajos precarios, qué nos den un palo, que la gente se ve desahuciada, que tienen que dormir entre cartones, que peligran nuestros sueldos y las jubilaciones, que anda la economía, no nacional, sino toda, como las muñecas de famosa ,porque ya están llegando al portal…¡A ellos les da igual!, porque lo arreglan , como cuando la Esteban dijo que la crisis de Grecia se solucionaba con hacer lo que había hecho ella que era irse a un crucero por allí, pero que teníamos que hacerlo en bloque los millones de españoles que somos, o los millones de europeos , vayan ustedes a saber…                                                                                                                                            
La Pantoja, que ha hecho las paces con Telecinco y su niño que está como Dios en todas partes, habían vendido al Hola, a bombo y platillo, que el nene de 27 iba a sentar la cabeza con la niña de supervivientes, una miss, pero ahora miren ustedes por donde en este mundo tan rosa estridente , están todos de duelo, porque han perdido el embrión, que ni feto era el pobrecito, si nos vamos a creer que existía, ya que las cuentas ni a los colaboradores del tema les salen, que si estaba de cuatro semanas que si de ocho, que no sé yo , habiendo exclusivas por medio, que no sería la primera vez, acuérdense de Gonzalo de Borbón y era de casa regia, con qué carta quedarme.                                                                         
Lo normal es llegar a tu casa jart@ de trabajar y que los niños te den la tabarra , que tengas que recoger la mesa y encima escuchar al mayor quejarse de qué mala es su vida cuando no da tampoco, como el otro, palo al agua , más que para estudiar, que por lo menos este hace eso, que será muy costoso, eso dice él, porque los que tuvimos la ciencia, lo mismo lo recordamos como lo mejor de nuestra vida.                                              
Pero ellos ladran y se quejan, con la consolita o el teléfono de última generación que pagas tú con tus horas extras, que ya no hay pero no importa porque cuidas a la niña de la del segundo , que la madre también está haciendo doble turno como tú y compras en el Día porque es más barato y escurres el plato de sopa, aunque diga el que se queja siempre, que él sopa no come que eso es comida de sobre y de pobre, las dos con las erres intercaladas que al más chico de la casa le cuesta tanto pronunciar.                                   
Y tú piensas…¡¡¡la madre que los parió a todos!!!, pero Isabel no, ella solo se duele del embrión de la Jessi y el Francisco, del embrión con futuro de portada del Hola y del interviú, con papel estelar en Torrente 24 y colaboraciones en programas del corazón palpitante , que no deja de sangrar porque la hipoteca pega puñaladas, los ERE están a la orden del día y la luz por pagar.                                                                                                  
Si hasta yo lloro, los ojos congestionados, la nariz tapada y con la vacuna de la gripe puesta y con gripe a cuestas, de verdad, díganme si no es para llorar, con la niña desde la seis despierta,  porque se asfixiaba y tristona perdida , porque el dinero que habrán perdido de esa triple o cuádruple exclusiva , que era anuncio de embarazo y boda, repercusiones sociales, la boda, nacimiento, el bautizo y demás y paseándose por televisiones y haciendo bolos y nosotros sin dinero para pagar el AMPA de los niños, la cena de navidades, los regalos de los sobrinos, el chaquetón de la chica, las gafas del mayor, el autobús, o el bono que sale más barato, las consolas y la lista de reyes y es que somos desgraciados , hasta para fecundar , que nosotros fecundamos en privado y abortamos en la seguridad social y no lloramos al hijo perdido, porque pensamos que será para mejor , que lo mismo estaba malito y por eso se fue, porque de todas formas, nos consolamos, como está la cosa cómo para venir con más niños a esta casa, claro que como no somos nadie y no nos paga el Hola el desliz, pues rechinamos dientes y secamos lagrimas.