“Esto no es un juego de niños, son asesinos, iban a matarlo”

• Mientras Yunes Mohamed se recupera de las heridas en el Hospital, su hermana y padre narran los peores momentos de una agresión brutal

• En la noche de ayer, al cierre de esta edición, se fugó el único detenido

“No es un juego de niños, son asesinos”. Guita Mohamed, hermana de Yunes, el joven de 28 años, técnico superior de mantenimiento, herido gravemente tras un brutal apuñalamiento ocurrido en la tarde del miércoles en las inmediaciones de la Cuesta Parisiana, lo tiene claro. Quienes, armados con machetes, atacaron a su hermano, un joven “sano y deportista”, “iban a matarle”.

Tres fueron las puñaladas que recibió en la espalda, una en el brazo y otra más en el antebrazo, “aunque ésta iba dirigida al cuello pero mi hermano levantó el brazo para defenderse y por eso sufrió un corte muy profundo”, explica en una entrevista con El Faro. La familia de Yunes, vecina de Vicedo Martínez y muy querida en la barriada, le cuida ahora, le arropa con el único pensamiento y deseo de que pueda salir adelante. “Mi hermano está vivo de milagro. Esperemos que salga de esto bien pero le han truncado la vida. Le habían llamado para cubrir bajas en el Hospital, de mantenimiento, y ahora le pasa esto...”, lamenta Guita, quien desconoce cómo será la evolución de las heridas, después de que a Yunes le tuvieran que intervenir en el quirófano al sufrir daños en varios tendones. “Llegó a entrar en parada pero le reanimaron, está vivo de milagro”, explica.

Yunes es víctima de unos desaprensivos, de unos criminales que no dudaron en arremeter con violencia contra el joven, solo en venganza porque éste había intentado mediar ya que le habían robado la moto a un vecino y amigo suyo. “Cuando mi hermano les recriminó que quisieran robarle la moto a un amigo, éste”, en referencia al agresor principal, “le dijo que por haberse metido se la iba a devolver. Le amenazó. Después regresó con cuatro más de la zona de Cuesta Parisiana y atacó a mi hermano cuando estaba de espaldas. No se lo esperaba, se abalanzaron sobre él y le apuñalaron”, explica. “A todos nosotros nos han educado con valores y esto le ha pasado a mi hermano por meterse ante una injusticia”, añade.

La familia de Yunes, una nueva víctima de la violencia en la ciudad, no quiere que este asunto caiga en saco roto, pide que no se olvide, que no pase como un suceso más en la crónica negra ya demasiado habitual en la ciudad. Quieren justicia porque además de causar daño al joven, un chico que “estaba feliz, trabajando en lo que ha estudiado y siempre superándose”, le han “truncado su vida”. “Queremos que esto se sepa”, no que se pase por alto como algo propio de la delincuencia común, ya que Yunes nada tiene que ver con ese mundo. Muy al contrario, él es un ejemplo de joven que se ha formado, estudiado y preparado para salir adelante siguiendo los consejos de su familia. “Todos los que le conocen están sorprendidos, vienen a verle al Hospital para ver cómo se encuentra”, explica Guita, que pide a los “políticos” que “se mojen” y resuelvan “lo que está pasando”, porque “todos estamos expuestos a esto. No es algo casual, cada día se conoce algo nuevo. Deben ser consecuentes con lo que está pasando en la ciudad”.

Las palabras de Guita se suman a las del progenitor de la familia, Riahi Mohamed, quien explica a las cámaras de FAROTV cómo se enteró de lo sucedido, confiando ahora en lo principal: que su hijo salga adelante, mientras evoluciona poco a poco de sus graves heridas.

“Estaba en la azotea cuando escuché unos pasos, pensé que eran jóvenes peleándose. En la calle había mucha gente, muchos jóvenes, parecía que algo había pasado pero no se atrevieron a decirme nada, quizá tuvieron miedo o vergüenza”, recuerda. Después se enteró de que su hijo era el apuñalado, la persona que, tendida en el suelo, era asistido por los sanitarios. Riahi Mohamed sitúa lo ocurrido a su familia en un ambiente de dejación social absoluta, con comportamientos criminales de los que nadie escapa. “Para mí todos somos culpables, estamos abandonando a nuestros hijos... Echamos la culpa a los demás y dejamos de dirigirnos a nosotros mismos, porque también somos culpables, el callarse el abandonar a los hijos… Esto, a largo plazo, lo estamos recogiendo, es un abandono nuestro de las creencias y de las políticas”, expone emocionado, confiando en que todos los implicados sean detenidos y se haga, solo así, justicia por lo acontecido.

Investigación sobre el terreno y contratiempos

La Policía mantiene abierta la investigación para dar con todos los implicados en esta brutal agresión que ha dejado a un joven en el Hospital, con múltiples heridas causadas por empleo de armas blancas, machetes y, no se descarta, catanas. Sucedió en el entorno de Parisiana.