El animal está en la Perrera donde pasará el periodo de protocolo antirrábico de 21 días
El niño de 3 años que la pasada tarde del martes fue evacuado al Hospital Virgen Macarena de Sevilla tras ser mordido por un pastor alemán, está estabilizado y su estado no reviste riesgo para su vida.
Según el último parte médico del centro hospitalario, el pequeño sigue en la UCI aunque ayer por la tarde fue extubado y su evolución es muy favorable.
Tras recibir los primeros cuidados en la unidad de Urgencias del Hospital Universitario de Ceuta, el menor fue evacuado a Sevilla, donde llegó a las ocho de la tarde del martes, siendo inmediatamente operado por cirujanos maxilofaciales.
El ataque le provocó heridas de seis centímetros de largo y tres de profundidad en cuero cabelludo y parte de la mejilla derecha, además de pérdida de movilidad facial que ahora deberá recuperar con rehabilitación.
Por su parte, tras el ataque el perro pasó la noche en las dependencias de la Protectora de Animales, donde fue trasladado por el servicio de recogida de Athisa, dentro de la colaboración por la cual la asociación animalista le cede sus jaulas a la empresa adjudicataria de dicho servicio.
Según ha podido conocer El Faro, el animal fue encontrado atado a una ventana de la vivienda de su propietario en la calle Narváez Alonso.
El perro ha pasado por las instalaciones de la Perrera Municipal donde deberá pasar un periodo de 21 días, según marca el protocolo antirrábico.
Además, durante este periodo los trabajadores de la Perrera Municipal deberán realizar una evaluación del comportamiento del perro a fin de determinar qué tipo de actitud tiene, si se muestra agresivo o ha recibido algún tipo de adiestramiento, entre otras cuestiones, que serán determinantes para decidir qué ocurrirá con el can una vez superado el periodo de aislamiento.
De momento, se desconocen las circunstancias en que se ha producido el ataque al pequeño, aunque los próximos 21 días pueden ser determinantes para deducir si la agresión estuvo motivada a que el perro no esté acostumbrado al contacto humano.
Por otra parte, la Ciudad está estudiando las posibles sanciones al propietario del animal dada su situación administrativa, ya que el perro carecía de todo tipo de documentación.