Con más 20 años de historia, ‘Manualidades África’ Textiles es el lugar idóneo donde encontrar un gran surtido de materiales para hacer manualidades, pinturas y Bellas Artes en Ceuta. En los últimos doce meses África García Jiménez ha tenido que tener cerrada su tienda, pero ya ha reabierto con más ganas que nunca. Aunque la vena empresarial le viene de su padre, Juan García Chicón.
“Nosotros nos dedicábamos al comercio. Mi padre desde los años 40 o así, con 20 años, empezó con negocios. Primero en la alimentación, tenía almacenes al por mayor. Luego en el puerto teníamos un supermercado y aquí otro. Esta tienda fue primero un súper. Yo empecé trabajando con mi padre desde los 18 o 19 años y estuve con él hasta que ya cerramos los negocios”, recuerda África García Jiménez, propietaria de ‘Manualidades África’.
Esta familia de emprendedores también tenía una panadería en la calle Peligros, que también se cerró “hace unos años”. “Los fuimos cerrando para que mi padre se jubilara porque sino, no había manera de jubilarlo, y ya me quedé yo con esto porque mis hermanos tienen otras profesiones. A la que más le ha gustado el comercio ha sido a mí”, continuaba para las cámaras de FaroTV.
Una idea y un negocio que han ido evolucionando con el paso del tiempo siempre en función de las necesidades y demandas de los ceutíes, pero que empezó siendo muy pequeñita y vendiendo solo algunas cosas. “Ya cuando quisimos que mi padre se jubilara quitamos este súper y pusimos la tienda en el 2000. Ahora en enero ha hecho 21 años. Empecé con poquita cosa y, poco a poco, fuimos aumentando con manualidades nuevas”.
Lo primero que empezó vendiendo era escayolas y maderas, además de cosas de Bellas Artes. “Desde el principio tenemos todo de Bellas Artes y manualidades. Ya luego fueron saliendo otras cosas como masas moldeables, cosas para hacer abalorios, luego vino el ecopack (que consiste en el reciclaje de embalajes), el scrapbooking que se hacen álbumes y libros personalizados, y ya desde hace unos siete años metí lo que es el patchwork, que es lo último así que tenemos”, explicó.
Sin embargo, esta tienda del número 21 del Paseo de la Marina se ha convertido en gran parte de la vida de África. Una pequeña tienda a la que también han afectado mucho estos meses de pandemia y que durante el confinamiento estuvo cerrada. “Lo que era el confinamiento cerré y a los 20 días vine a echar un vistazo y me encontré el techo en el suelo. Es lo único que tengo que agradecer al confinamiento que el techo se cayó cuando no estábamos aquí. No podíamos hacer nada y hasta octubre no empezamos la obra. Hemos estado cerrados desde que empezó el confinamiento hasta ahora, hace dos semanas que he abierto de nuevo. Ya tenía muchas ganas de estar en mi tienda”.
A sus 60 años y después de una vida tras el mostrador, África quiere jubilarse en su tienda. No obstante, ha sabido adaptarse a la situación y para evitar que los clientes más mayores tengan que desplazarse hasta la tienda para preguntar por un producto, cada vez son más los que optan por los encargos por teléfono o redes sociales y ya cuenta con reparto a domicilio. Y eso, los ceutíes han sabido agradecerlo: “Tenía mucho miedo porque muchos se pensaban que yo había cerrado para siempre, pero es verdad que la gente ha respondido muy bien y eso es de valorar como están las cosas”, concluyó.