Los
comercios de barrio son cada vez menos por culpa de la competencia y las grandes superficies. Eso hace que a estos pequeños comerciantes les sea casi imposible subsistir por la pérdida de ingresos, pero hay quienes luchan para seguir con las puertas abiertas contra viento y marea, como es el caso de José Luis, quien lleva 19 años con su
carnicería abierta en la céntrica calle Mendoza. Es un alivio para las personas que viven por los alrededores.
“En este negocio voy para 19 años. Estaba trabajando en la calle y decidí dejar mi trabajo para montar esta carnicería porque el local era de mis padres. Monté esto sin saber nada, pero decidí tirar para delante y la verdad es que no me va mal”, explicó.
José Luis García, propietario de la carnicería, reconoció a FaroTV que no tenía conocimiento alguno del sector y que fue un autodidacta ya que aprendió de los errores y aciertos del día a día y, sobre todo, por consejos de amigos y las orientaciones que le proporcionaba su mujer. “Todo esto fue a la aventura, orientado por mi mujer. Un día cortaba el filete al revés, otro al derecho y así he ido aprendiendo. Autodidacta, porque mis padres no tenían carnicería, ni yo había trabajado previamente en ninguna pero fui aprendiendo solo”.
El propietario de este negocio se mostró muy satisfecho por su paso durante los 19 años y no se arrepiente de cuando, sin experiencia alguna, decidió montar la carnicería como sustento económico.
“La valoración que saco de estos 19 años es muy buena. Mi vida me ha cambiado para mejor porque pasé de estar en la calle ahora tranquilo aquí. Que es verdad que las ventas han bajado, pues sí, pero yo he pasado aquí años muy buenos. Es verdad que todo ha bajado porque hay mucha competencia, pero no me puedo quejar gracias a Dios”.
Aunque la especialidad de la tienda es la venta de carnes, allí uno puede encontrar productos de todo tipo para sacar de apuros a las personas que viven por los alrededores. “Aquí pueden encontrar un poco de todo. Pollo, ternera, cerdo, cosas caseras… así como otros productos como aceite, garbanzo, leche y hasta lotería tengo aquí”.
Las ventas no se han visto demasiado afectadas por la pandemia del coronavirus, como ha ocurrido en otros sectores, al ser un negocio esencial, y las personas preferían comprar cerca de sus casas para cumplir con el confinamiento. “Al principio los primeros meses de la pandemia, al estar todo el mundo confinado, hemos vendido mucho. Ya se ha estabilizado todo y ahora se vende lo normal. Vamos tirando que es lo principal, y la salud por supuesto”. José Luis García espera poder seguir al pie del cañón, al menos los 7 u 8 años que le quedan para jubilarse, para poder seguir prestando el mejor servicio a los vecinos de Ceuta.