-
La AD Ceuta FC está en su mejor momento gracias a haber dejado la portería a cero en las últimas seis jornadas
-
Pablo Antón supera su récord: 582 minutos sin encajar un gol
La AD Ceuta FC es el mejor equipo de la segunda vuelta en el Grupo 10 de Tercera División, y buena parte de culpa la tiene el no haber encajado un solo gol en los últimos seis partidos, lo que le ha valido al conjunto blanco para recortar la distancia respecto al play-off de ascenso, a siete puntos.
En esta estadística tiene un protagonismo especial el portero, en este caso el caballa Pablo Antón, que ha pulverizado su récord y son ya casi 600 minutos (582) sin haber recibido un solo tanto.
Para el meta el ‘secreto’ es “trabajar duro día a día, semana a semana”, aunque también reconoce que parte importante está siendo el “ir día a día, sin mirar más allá del próximo partido, y pensando que éste será el último”.
La llegada de Juan Ramón al banquillo ha sido un revulsivo. Aunque Pablo no quiere que toda la responsabilidad recaiga en la salida de Masegosa, sí reconoce que “el equipo se ha conjurado y el míster nos ha quitado presión, y nos ha hecho ver que somos un gran grupo. Nos ha dado alas”.
En cuanto a su racha, señala que “para un portero no encajar un gol siempre te motiva y da mucha confianza”, pero matiza que “el mérito no es mío, es de todo el equipo, del primero al último”.
Aunque la sombra de José Garrido, posiblemente el mejor portero de las últimas temporadas, es alargada, Pablo no habla de presión, pero sí señala que “además de un gran portero fue un excelente compañero, y no hay duda de que dejó un hueco difícil de llenar”, apuntó.
Hay que recordar que Pablo fue relegado al banquillo y le sustituyó Iván Villanueva. Para el meta ese momento “me sirvió para seguir trabajando e intentar dar el máximo, y por ahora las cosas están saliendo bien”.
En cuanto a si piensa en el récord, dice que no, y añade que “yo le digo a mis amigos y familia que prefiero ganar por 3-4 a quedar cero a cero”, concluyó el guardameta ceutí.
Juan Ramón: “No hay varitas mágicas, hay ganas de trabajar y de ser una gran familia”
El entrenador no habla de varitas mágicas a la hora de analizar su gran desembarco en el banquillo: es un trabajo “duro” que se hace “con ganas e ilusión”.
Para el astigitano es importante “ser una familia”, y no sólo el vestuario, ya que también menciona al presidente, “un caballero del fútbol”, aseguró en declaraciones a este medio.
Recalca “el trabajo de todos, es una cuestión de compañerismo y de confianza”, lo cual se ve “refrendado domingo tras domingo”.
Y no cree que al equipo le pese mantener la portería a cero,
al contrario, “esto nos da confianza”, y aunque es cauto y quiere tener “los pies en el
suelo”, sí señala que “es bonito tener ilusión y soñar con cotas más altas”.