Un silencio inquietante se cierne de nuevo sobre Marruecos. Un hombre, padre de tres hijos, ha fallecido este sábado, 25 de noviembre, tras caer en un pozo en la aldea de Bani Qasim, en la comuna de Bani Razin, en la provincia de Chefchauen, según informan los medios de comunicación marroquíes.
Su muerte trae a la memoria la tragedia de Rayan, el niño de 5 años que perdió la vida en similares circunstancias a comienzos de 2022 cerca de Chauen.
La región de Chefchauen se ha visto sacudida este sábado nuevamente por un accidente en similares circunstancias que ha causado una gran conmoción entre quienes lo presenciaron y entre las personas que conocían al fallecido o a su familia.
Según fuentes consultadas por Press Tetouan, el hombre se precipitó por un pozo estrecho y abandonado. Según medios locales de la zona, la víctima, padre de tres hijos, cayó en el pozo mientras estaba recogiendo agua para posteriormente regar sus plantas.
De esta manera, tras producirse el accidente que ha acabado con la vida de este hombre, del que aún se desconoce su edad, se avisó rápidamente a las autoridades locales, que llegaron al lugar acompañadas de agentes de la Gendarmería Real.
Finalmente, fruto del trabajo de todos los organismos implicados en el rescate del cuerpo de este hombre, el cadáver fue recuperado y trasladado a la morgue del Hospital Regional de Chefchauen.
Las autoridades de la Gendarmería Real han abierto una investigación para determinar las causas de la caída de la víctima en el pozo y esclarer cómo sucedieron los hechos.
El incidente movilizó a todas las autoridades de seguridad y protección civil para, finalmente, rescatar al hombre después de un arduo esfuerzo.
Una vez más, esta tragedia plantea preguntas sobre el cumplimiento de los propietarios de los pozos en relación alas medidas de precaución para evitar este tipo de sucesos.