Montero defiende la “tolerancia absoluta” del empresariado

Dice que Aróstegui es “un dinosaurio político-social” que cambia de discurso “dependiendo de la chaqueta que lleve”

El presidente de la CECE, Rafael Montero Ávalos, defendió ayer la “tolerancia absoluta” que existe en el empresariado ceutí para que los musulmanes puedan celebrar con normalidad su Pascua, y aunque dijo que no se siente ofendido ni se toma como algo personal las declaraciones del pasado viernes del diputado de Caballas Juan Luis Aróstegui, sí se sintió aludido y cargó contra este, de quien dijo que está “equivocado”. Como ejemplo de esta tolerancia, Montero recordó que en los convenios ya existe una cláusula para facilitar el día festivo. El líder de esta organización empresarial fue respondiendo, una por una, a todas las afirmaciones vertidas por Aróstegui en la rueda de prensa del pasado vienes, a pesar de que este no nombrara a la organización empresarial salvo cuando señaló directamente hacia la CECE y tachó de “mentiras” las afirmaciones de su máximo dirigente cuando dijo que el baile de fechas en el calendario se traduciría en el cierre del comercio durante dos días consecutivos.
Sobre este asunto, Montero dijo que “en ningún momento” afirmó que serán dos días de fiesta, sino que “la actividad se verá mermada a casi como los días festivos”, y que si alguien duda de sus palabras visite mañana el mercado central “a ver cuántos puestos tenemos abiertos, ya que si el martes –por hoy– es la fiesta oficial y el miércoles –por mañana– el día del Sacrificio, esos empresarios cerrarán, por lo que nos encontraremos con un día festivo y un día prácticamente o efectivamente como si fuese festivo”. También dijo que podrían visitar el Tarajal para comprobar esta teoría. “No son dos días festivos pero, al final, lo que ocurre es que el hecho será ése”, manifestó.
Montero quiso aclarar que sus declaraciones sobre este día son “simple y llanamente económicas” respecto del daño y el perjuicio que se causa en la ciudad “por cualquier cierre o falta de normalidad en la actividad económica, no porque sea la festividad del Sacrificio, me da igual que sea ésta, el Año Nuevo hebreo, la festividad de Ganesh, el Año Nuevo chino, las cruces de mayo o Semana Santa”.
Montero rechazó el apelativo “racista” y dijo que “quizá el racista es él –por Aróstegui– más que ninguno, porque no lo he visto poner tanto empeño por colectivos como el hebreo o el hindú, que también son importantes en la ciudad”. El líder de la CECE también afirmó que “el que posiblemente ya esté desfasado, desde hace ya mucho tiempo, no desde ahora, es el señor Aróstegui, a quien considero ya un dinosaurio político-social en esta ciudad”, además de afirmar que “posiblemente el que menos vergüenza tiene en el panorama político-social de Ceuta”. Montero añadió que la postura del diputado de Caballas en los foros depende “de la chaqueta que en ese momento lleve puesta o le interese ponerse” y añadió que a Aróstegui “le da igual, con tal de permanecer en el candelero, coaligarse, acercarse, pactar con quien sea, sin menospreciar al partido que representa el señor Alí, a UDCE y a coalición Caballas, que me merece el mayor de los respetos y a quien el señor Aróstegui debe su escaño de diputado en la Asamblea”.
La CECE responsabiliza del cambio de fecha “al Gobierno, que además reconoce su error”. No obstante, fue la Asamblea –es decir, los tres grupos, PP, PSOE y Caballas– la que aprobó el cambio. Para evitar que esto se reproduzca, propone que se establezca “cuando la comunidad islámica nacional lo ha marcado, no cuando el Pleno de la Ciudad le apetece, o quiere cambiarla o lo decide”. Debido a que Aróstegui respaldó la gestión de Vivas en el tema, Montero señaló que aquél parece “el portavoz de su Gobierno”.

Lo que dijo Aróstegui...

“Es rigurosamente falso que quienes celebren la fiesta descansen un día más de lo fijado por ley”

Aróstegui no criticó directamente a la CECE en sus declaraciones del pasado viernes, se refirió a quienes –dijo– intentan crispar la convivencia de la ciudad avivando la polémica desatada en torno a esta fecha. El concejal de la coalición dijo también que es “rigurosamente falso” que los empleados que celebren la fiesta descansen un día más de lo fijado por ley. Así, dijo que es “absolutamente falso” que el baile de fechas en el calendario se traduzca en el cierre del comercio durante dos días consecutivos. “El miércoles es laborable, se abre, y los musulmanes que trabajen estarán en su puesto, y quien no lo haga será porque lo compensará con otro día”, afirmó Aróstegui, quien añadió que desde hace 15 años, en esta ciudad los principales convenios colectivos incluyen una cláusula que facilita a estos trabajadores descansar el día de la Pascua, y que esta jornada se compensa cambiando el día por otro festivo, por un día de asuntos propios o recuperando horas, algo que –dijo– debe conocer la CECE.
En esta línea, Aróstegui recalcó que “la ciudad parece haberse convulsionado por algo que no es preocupante”, ya que “en 2013 habrá 14 festivos, como toda la vida”. Así, rechazó de forma enérgica “que ni un solo trabajador musulmán vaya a tener más días de descanso que el resto”.