El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación,
José Manuel Albares, volverá a recibir al presidente de Ceuta,
Juan Vivas, el próximo lunes a primera hora de la tarde en la sede de su departamento en Madrid, donde ambos tendrán la oportunidad de analizar el resultado de la
última Reunión de Alto Nivel (RAN) con
Marruecos celebrada los días 1 y 2 de febrero
en Rabat y los flecos pendientes sobre la gestión del tránsito de personas y mercancías por el paso del Tarajal.
Albares se reunió por última vez con Vivas en la capital a finales de septiembre del año pasado. Entonces la apertura de la
aduana comercial con el país vecino, uno de los compromisos adquiridos por España y Marruecos en abril, fue el asunto central de su encuentro.
Previsiblemente ahora ese volverá a ser un eje central de su charla. La puesta en marcha de la aduana se ha anunciado “gradual” y “progresiva” tras la
“prueba piloto” que se realizó el pasado 27 de enero, pero sigue siendo poco o nada lo que se sabe de qué mercancías podrán transitar por la
frontera ceutí en ambos sentidos ni a partir de qué fecha.
Desde la reapertura “parcial” del paso del Tarajal el pasado 17 de mayo, Vivas no ha dejado de solicitar al Gobierno de Pedro Sánchez que elimine definitivamente la excepcionalidad que en el Tratado de Schengen permitía hasta marzo de 2020 la entrada en la ciudad de los residentes en la región marroquí de Tetuán solo con su pasaporte y sin visado.
El presidente de la Ciudad ha apostado en repetidas ocasiones por que la exigencia de visado se consolide de forma permanente y ha reclamado que en el Tarajal se abra una aduana comercial como la de cualquier otra frontera internacional, no con el apellido “regional” que de momento le ha venido poniendo la Administración General del Estado.
Entre los asuntos que también son competencia de Albares y que siguen sin activarse están otras reivindicaciones de la ciudad como solicitar su entrada en la Unión Aduanera europea o hacerse con un asiento en el Comité de las Regiones de la Unión Europea.