Mil meses escuchando ángeles

El Centro Cultural Al Idrissi celebra la Noche del Destino escuchando Taywid, versos del Corán que niños recitaban tras trabajar durante todo el año con mucha paciencia y práctica sus voces

En silencio, decenas de personas escuchaban ayer con detenimiento las voces de los niños que mejor recitan el Corán no sólo los que han aprendido en el Centro Cultural Al Idrissi, sino varios chicos llegados desde Castillejos para colaborar en el acto. Con imágenes de la ciudad de La Meca visionadas tras el sillón sobre el que se sentaban los aprendices de Taywid, el ambiente en la nueva sede del centro cultural, en Hadú emanaba lo que correspondía. “Hoy es un día muy especial. Es la noche del destino. Todos estamos contentos”, explicaba una de las madres asistentes al acto. Los responsables de Al Idrissi quisieron dejar el protagonismos a ellas, a sus hijos “y a todos los que nos apoyan y hacen posible que hoy estemos aquí”. Dentro del programa de actos llevado a cabo con motivo del Ramadán, el recital de los versos del Corán de ayer, en taywid, era uno de los más esperados. “Es un arte, no todos pueden hacerlo. Se trata de una verdadera artesanía en la voz y llevan todo el año preparándose para sonar como lo hacen: como ángeles”, explican los responsables de la entidad.
Pero para que todo salga adelante, son esos padres y esos niños, los que deben luchar por conservar las tradiciones. “Me gusta ser musulmana, nuestra cultura y que se conserven las tradiciones”, explicaba Sufana, de once años, momentos antes de subirse al escenario. Su madre se llama Rocío. La observa con orgullo. Ella intenta transmitirle todo lo que ha aprendido desde que se convirtió al Islam hace ya 16 años. “El musulmán está muy orgulloso de su tradición y lucha por conservarla”, explica. Su hija sigue los pasos para hacerlo. De hecho, ella, junto a otros muchachos, son el ejemplo de ello. Amina es la madre de Leila, que con diez años ha recitado un versículo bajo la atenta escucha y mirada de todos. “Practica mucho en casa y no está nerviosa”, dice.
El acto sirvió además de jornada de convivencia junto a los niños de un centro de Castillejos que también participaron en el recital que comenzó a las 19:00 horas y finalizó minutos antes de la ruptura del ayuno.
Ayer los musulmanes vivieron la noche más especial del año inmersos en el mes sagrado. Su noche del destino, de purga de sus pecados, de rezos y ruptura del ayuno en familia dando gracias y pidiendo perdón a Dios. La creencia musulmana dice que fue durante esta misma noche cuando Dios escribió los primeros versos del Corán, que ‘El espíritu de la revelación’ Gabriel le trasmitió a Mahoma cuando éste tenía cuarenta años. “Lo hemos revelado en la Noche del Destino.  Y, ¿cómo sabrás que es la Noche del Destino?. La Noche del Destino vale más que mil meses. Los ángeles y el Espíritu descienden de ella, con permiso de su Señor, para fijarlo todo. ¡Es una noche de paz, hasta rayar el alba!”. Los versos anteriores hablan de esta noche, considerada por los musulmanes como “tan valiosa como mil meses que eso al fin y al cabo es todo lo que nos queda de vida”, comentan desde el centro Cultural. El mes entero de Ramadan es un período de entrenamiento espiritual en el que los creyentes se dedican a ayunar, rezar, recitar el Corán, recordar a Dios y a hacer caridad. Además, debido a la importancia de esta noche, los musulmanes se esfuerzan al máximo en los últimos diez días del Ramadan, ya que la Laylat al-Qadr puede ser cualquiera de estos últimos días (el primero, el tercero, el quinto o el séptimo). Ayer las mezquitas estaban más llenas que nunca, un lleno, que pretende conseguir Al Idrissi en la nueva sede con los actos que lleve a cabo en adelante. Hoy mismo, el coro de la entidad, llevará a cabo una actuación demostrando por qué ha obtenido premios en Marruecos. La cita es a las 19:00 en el local ubicado frente al mercado de Hadú.

Un recital junto a Luna Blanca como fin de Ramadán

La noche del viernes, como fin de Ramadán, el Centro Cultural Al Idrissi y Luna Blanca, se unen para llevar a cabo un acto que conmemore la finalización del mes sagrado. Será en la carpa que Luna Blanca ha montado al lado de la mezquita de Sidi Embarek a media noche. “Todos habremos roto ya el ayuno y celebraremos el final de Ramadán reuniéndonos allí para escuchar el Corán”, explican los responsables del Centro Cultural que aplauden la iniciativa de Luna Blanca de colaborar juntos por esta causa. Esa noche, el grupo Azzohor llevará a cabo un concierto de anachid (cánticos religiosos) y por otra parte, se recitarán versículos del Corán como se hizo ayer en la nueva sede del centro cultural. Se invita a todos los que deseen pasar un buen rato a asistir al acto.