Una usuaria de la
playa de la
Almadraba ha compartido con El Faro de Ceuta una serie de fotografías con las que quiere denunciar el estado en el que se encuentra la zona del litoral que frecuenta en verano para refrescarse. En las imágenes puede verse cómo los niños juegan con sus cubos, nada raro en esta época del año, si no fuera porque están rodeados de "mosquitos y de algas" varadas en la orilla que, aparentemente, se adentran varios metros en la arena. Solo reclaman su retirada y
limpieza. El aspecto que presenta ese manto que cubre el arenal resulta desagradable, más aún cuando los usuarios tienen que sortear tal cantidad reseca para disfrutar de un chapuzón en el mar. “Es asqueroso y los niños no se pueden ni bañar”, sentencia la vecina que aporta el material gráfico e incluso un vídeo con el que quiere demostrar el abandono del arenal.
El arribazón de algas marinas ya es crónica para la ciudad autónoma, donde tanto la bahía sur como norte padecen la llegada masiva de estas plantas que están sometidas a estudio dado su carácter colonizador y cuyo avance los científicos quieren contrarrestar. Su acumulación en los arenales, ya sea por el fruto de su recogida irregular o por la gran cantidad que recala en las costas ceutíes, trae otros problemas consigo como pueden ser la presencia de insectos y el mal olor. Estas son algunas de las molestias que han percibido los usuarios de la playa de la Almadraba y que han querido difundir para que las autoridades tomen cartas en el asunto y adopten las medidas necesarias encaminadas a su retirada. El público de otras playas, como el de Benzú o Calamocarro, también ha puesto el grito en el cielo ante la tardía retirada de estos mantos de las playas en este año marcado por la pandemia del coronavirus.