El menor que llegó a nado procedente de Marruecos
junto a un adulto que sigue desaparecido se ha marchado de la nave del Tarajal, en donde había sido ingresado para cumplir la cuarentena establecida en prevención del coronavirus. En la madrugada de este martes llegaba a tierra, a la
zona del Recinto, informando que su compañero de travesía se había quedado en el mar, sin fuerzas para llegar. De inmediato se activó el protocolo de búsqueda mientras que se atendía al menor, a quien se le trasladaba a la nave ubicada al lado de la frontera para guardar la cuarentena establecida. Pues bien, resulta que a las horas se fue de dichas instalaciones sin que se sepa dónde está. No constaba escapada de personas a Marruecos, así que se baraja que pudiera estar en la zona portuaria con otros menores o en alguna de las instalaciones que usan como cobijo. Mientras, Salvamento Marítimo tuvo que suspender ayer las labores de búsqueda del marroquí desaparecido para las que había empleado medios aéreos, terrestres y marítimos. No hay rastro del vecino de Marruecos, de 21 años, nacido y criado en Castillejos. Hoy se espera la reanudación de esa búsqueda, a la que ayer se sumó la Cruz Roja con una pequeña lancha. Precisamente ayer avisaron a la familia de Badr ante la aparición de una persona con vida en el mar que había sido trasladada al hospital de Rincón. Cuando fueron los familiares a comprobar si se trataba de este desaparecido, verificaron que no era él sino otro chico que se había arrojado al mar. Siguen produciéndose entradas en Ceuta de manera clandestina, bordeando los espigones fronterizos. Así como siguen produciéndose las marchas de los atrapados que quieren volver a su país. Unas y otras acciones vienen marcadas por el riesgo.