Medalla de la Autonomía por su entrega a la ciudad

Recibió el galardón por su trayectoria laboral en la que la creación de empleo, la calidad y la solidaridad fueron pilares

Carlos Chocrón recibió en el año 2010 la Medalla de la Autonomía como reconocimiento a toda una larga trayectoria laboral en la que la creación de empleo, la calidad, el respeto hacia el medio ambiente, la solidaridad, la constancia y el esfuerzo fueron algunos de sus pilares fundamentales.
El empresario mostró siempre su intención de colaborar en el desarrollo de la ciudad y en otros muchos proyectos solidarios. Por ello creó la Fundación Chocrón-Macías en honor a sus hijos Samuel y Sonia.
Para Chocrón fue una “satisfacción y orgullo” que le reconocieran su trabajo con la entrega de la Medalla, una noticia que acogió con “sorpresa y satisfacción. Cuando llevas a cabo una labor nunca piensas en el premio, sino en los demás”, manifestó en su día el galardonado en una entrevista con este medio.
El galardonado destacó, entre otras cosas, por su compromiso con la ciudad autónoma ya que además de haberle dedicado su vida, muchos famosos y diversas personalidades han conocido Ceuta gracias a él. Visitaron la ciudad personalidades como la directora de orquesta Inma Shara, la bailarina y coreógrafa Sara Baras o la responsable de distintos departamentos de la Casa de Alba, Genoveva Casanova.
La suerte del empresario fue que en vida se le reconoció la labor llevada a cabo y las apuestas que hacía en esta ciudad.
Por su personalidad y su reconocimiento en el país, Chocrón fue admirado por numerosos famosos. Prueba de ello fue la unión de diez destacadas personalidades de la vida social, cultural, deportiva, empresarial y artística de este país en un acto solidario para crear su catálogo de imagen con fines benéficos. Personajes que, a instancias de Chocrón, prestaron su imagen a cambio de colaborar con diez fundaciones benéficas de su elección. Colaboraron el seleccionador nacional de fútbol, Vicente del Bosque; el periodista Ernesto Sáenz de Buruaga; la gimnasta olímpica Almudena Cid; la cantante Amaia Montero; la directora de orquesta Inma Shara; el director general de Google España e Italia, Javier Rodríguez Zapatero; el entrenador de fútbol Quique Sánchez Flores; la bailarina y coreógrafa Sara Baras; el escultor Víctor Ochoa; y el jugador de fútbol Xabi Alonso.
Los últimos años han sido muy importantes para Carlos Chocrón. En 1993, Ceuta atrae la exposición del Museo Cartier de París, de joyas y relojes por valor de 1.000 millones de pesetas. En 2008 se realiza la campaña ‘Un árbol para las generaciones futuras’ y la presentación del catálogo anual de imagen Ch-08 en Ceuta.
Un año después Chocrón consiguió reunir a diez destacadas personalidades de la vida social, cultural, deportiva, empresarial y artística de España en un acto solidario para crear su catálogo de imagen con fines benéficos. Además, se celebra en Ceuta el acto del 60º aniversario de la prestigiosa firma.

Diversas campañas y donaciones

Chocrón ha realizado diversos proyectos laborales, sociales y medioambientales. Uno de ellos es su campaña ‘Un árbol para las generaciones futuras’, donde se realizó una acción solidaria con la Fundación Síndrome de Down y se culminó con la plantación de 6.500 árboles en la ciudad autónoma. Por dicha acción le fue concedido el Premio Encina de Medio Ambiente. Otro de los grandes gestos que hizo por los ceutíes fue la donación de dos desfibriladores a dos instituciones, lo que respondía a la filosofía de la Fundación Chocrón Macías de “ayudar y devolverle a la sociedad una parte de lo que esta nos ha dado siempre”, resaltó el propio Carlos Chocrón el día de la donación, recordando el lema que en su día pronunció su hijo Moisés.
La primera entrega se produjo en la estación marítima y la receptora fue la Autoridad Portuaria de Ceuta. Allí acudieron el delegado del Gobierno, Francisco Antonio González Pérez; el presidente de la Autoridad Portuaria, José Torrado; el director territorial del Ingesa en Ceuta, Fernando Pérez-Padilla; y el propio Chocrón, entre otros. El otro desfibrilador fue entregado al Parque Marítimo del Mediterráneo, un acto al que asistió el consejero de Sanidad y Consumo. Eran estas algunas de las acciones solidarias y sociales que, en vida, llevó a cabo el desaparecido Chocrón.

Una gran aportación a la profesión

Carlos Chocrón ha realizado una gran aportación a esta tradicional profesión, una aportación no sólo material, sino también humana. Y es que la Escuela-Taller de Joyería de la Fundación Chocrón-Macías ha conseguido que jóvenes con unas dotes artísticas dignas de admirar hayan llegado a dominar un oficio muy minucioso y mejorar sus posibilidades de acceso al mercado laboral para acabar convirtiendo este en su forma de vida.
Estos alumnos han realizado piezas de plata, de la que han aprendido que es más difícil para trabajar que el oro. Han elaborado anillos con orlas y piedras y han estudiado Gemología, concretamente el diamante, el rubí, la esperanza y el zafiro.
A través de esta Escuela-Taller, los jóvenes  han podido aprender los secretos mejor guardados de la profesión y se han podido formar en un ambiente del que destacaban el valor humano, concretamente la buena relación entre ellos o la integración transfronteriza, ya que uno de los alumnos es tetuaní.
Al finalizar este proyecto, los alumnos esperan ser contratados por una empresa, para lo que cuentan con un diploma acreditativo, o formar ellos una cooperativa, por lo que el logro conseguido a través de esta Escuela-Taller sería mucho mayor.
Debido a los buenos resultados de este programa formativo, la Fundación confirma su continuidad, para dar así respuesta a los jóvenes que quieran aprender el oficio y que quieran hacer de este su forma de vida y, por supuesto, para que no se pierda esta profesión que va ligada a la familia Chocrón.
La Escuela-Taller ha contado con visitas relevantes, como la de Genoveva Casanova, responsable de distintos departamentos de la Casa de Alba. Carlos Chocrón tuvo la oportunidad de enseñarle las instalaciones y el trabajo que se realiza en estas, que fue valorado por Genoveva Casanova.
Esta iniciativa arrancó con un presupuesto de 200.000 euros y está incardinada en el Proyecto Zafiro, y está dirigida a jóvenes dotados de talento y capacidad artística pero con escasos recursos económicos que reciben una formación eminentemente práctica para aprender el arte orfebre con maquinaria de primera generación desde sus principios básicos hasta el modelaje.