La consejera Adela Nieto defiende la gestión y advierte de que es un problema de fronteras
Una interpelación sobre la gestión en menores presentada por MDyC terminó poniendo en tela de juicio la política llevada a cabo por el Gobierno, sacando de nuevo a la palestra el crimen cometido contra la persona de Ibrahim Arraoui.
La diputada Fatima Hamed recordó al Gobierno que son ellos quienes tienen la responsabilidad sobre los menores que tutela, denunciando que no queda claro ni la gestión que desarrollan ni el control que ejercen sobre la entrada y salida a los centros de menores, lo que termina generando inquietud en la ciudadanía. “Incluso la Defensora del Pueblo les ha recriminado su laxa actitud en educación”, advirtió, remarcando que la presión es “cada vez mayor” sin que se note la efectividad de las medidas que adopta la institución municipal.
La responsable del Área, Adela Nieto, lamentó que no se les apoyara en este ámbito y advirtió a la diputada Hamed que la inmigración infantil de MENA no es más que una extensión de una inmigración de la que el PP no es responsable.
Nieto ofreció una larga exposición sobre lo que hacen con los menores, remarcando que se habían invertido más de 5 millones en su atención el pasado año, y poniendo sobre la mesa las múltiples actuaciones de corte educativo y de formación que se trasladan a los menores, amén de la escolarización en colegios e institutos y formación profesional.
Además de la atención al colectivo MENA, la Ciudad atiende también a menores que no son marroquíes sino subsaharianos y algún caso muy aislado de argelinos. La atención a los menores no solo la ejerce directamente personal contratado por la Ciudad sino que intervienen oenegés como Digmun a través de programas de alfabetización, Cruz Roja, ACCEM o Cardijn.
En cuanto a la apertura del que será el futuro centro de menores, la Ciudad insiste, como ya dijo la semana pasada al término del Consejo de Gobierno, en que se está perfilando el proyecto para su construcción en Piniers.