Marruecos y la UE negociarán para un acuerdo de libre comercio

Campos ya señalaba que Ceuta se enfrentaría a un “cambio radical” en su organización económica

Marruecos y la Unión Europea (UE) han acordado iniciar las negociaciones para alcanzar un acuerdo de libre comercio, tal y como anunció ayer en Rabat el presidente del Ejecutivo comunitario, José Manuel Barroso, quien realizó estas declaraciones en una rueda de prensa conjunta con el presidente del Gobierno marroquí, Abdelilah Benkirán.
El objetivo principal del acuerdo es facilitar la integración progresiva de la economía marroquí en el mercado interior de la Unión Europea, tal y como informó Efe.
“Marruecos es el primer socio de la región del Mediterráneo con el que la UE lanza una negociación de este tipo para alcanzar un acuerdo de libre comercio completo y profundo”, destacó el presidente del Ejecutivo comunitario.
Barroso afirmó que “el acuerdo profundizará nuestras relaciones económicas”, y recordó que “la UE es el socio comercial más importante de Marruecos y su primer inversor extranjero”.
Asimismo, el político portugués aseguró que Marruecos y la UE han finalizado las negociaciones sobre una declaración política cuyo objetivo es firmar próximamente un partenariado de movilidad.
“Las relaciones entre la UE y Marruecos han dado un nuevo giro gracias a un acuerdo político sobre el partenariado de movilidad, que garantizará la buena gestión de circulación de personas entre nuestras fronteras”, señaló Barroso.
El administrador solidario del Grupo GDT Interservicios de Ceuta, S.L. y colaborador de este medio, José María Campos, ya incluyó en un estudio sobre el debate de la Unión Aduanera, elaborado en 2008, que la creación del área de libre comercio entre ambas zonas significaría que los precios del comercio irregular de Ceuta dejarán de ser competitivos, con el consiguiente perjuicio para los ciudadanos marroquíes que lo llevan a cabo, para los comerciantes de Ceuta y también para la industria española y comunitaria, “porque, en caso de producirse la integración de esta ciudad autónoma en la Unión Aduanera, quedaría establecida una Aduana comunitaria en la frontera, con lo que el comercio que hoy es atípico, pasaría a normalizarse. Ceuta podría convertirse así en una plataforma logística para ventas a Marruecos de pequeñas o medianas remesas comerciales, perfectamente documentadas”.
Esta zona de libre comercio es el resultado de la firma, en 1995, del Acuerdo de Asociación que entró en vigor en el año 2000. En el mismo estudio, Campos añadió que “en teoría, Marruecos no debería tener influencia en estas decisiones por ser un país tercero y Ceuta territorio comunitario, pero es preciso tener en cuenta las excelentes relaciones que el país magrebí mantiene con Europa, la cual está especialmente interesada, como es lógico, en asegurar un equilibrio político y económico duradero en el norte de África”.
En un informe elaborado en el año 2001, el experto en la materia ya dijo que la reducción de los aranceles de aduana respecto a la UE hasta alcanzar el nivel cero y la devaluación de la moneda marroquí, el dirham, “podrían alterar completamente el sistema económico de la ciudad de Ceuta que se basa, en la actualidad, en el comercio irregular con Marruecos, alcanzando dicha alteración negativa, a la propia Administración Autonómica que obtiene unos 4.000 millones anuales –en aquel momento– por el concepto IPSI, cifra que se vería sensiblemente reducida”.
En esta línea, Campos ya señalaba que Ceuta se enfrentaría a un “cambio radical” en su organización económica, y que la recaudación del IPSI, “esencial para el mantenimiento de la Ciudad, puede verse gravemente afectada por la liberación de aranceles de Marruecos”.
En dicho trabajo, el experto en la materia señaló que podría ocurrir que “ante la nueva situación sea necesario cambiar las condiciones de este régimen de integración en la Unión Europea, pasando a una incorporación a la Unión Aduanera, en determinadas condiciones”.
Campos siempre mantuvo que Marruecos no está preparado aún para recibir todo el potencial europeo de mercancías sin pagar aranceles.

Un problema: Ceuta no cuenta con representación en Bruselas

Campos considera que la ausencia de representación en Bruselas y de un ‘lobby’ es un problema en este tipo de casos que afectan a la economía de la ciudad autónoma. El experto en la materia ya lo advirtió en un artículo que publicó en 1995. En aquel escrito añadía que era necesario decidirse por una representación modesta pero eficiente, utilizando personas introducidas en Bruselas par hacer ‘lobby’ allí, pero que conocieran a fondo la realidad y peculiaridades de Ceuta. Además, explicó que las formas de representación son muy variadas, desde las oficinas propias hasta representación a través de las sociedades de fomento o de especialistas externos, entre otras.
El Gobierno de la Ciudad Autónoma mantuvo conversaciones con el de la Comunidad de Murcia para establecer representación en Bruselas a través de la oficina de esta autonomía. No obstante, este proyecto nunca llegó a fructificar y Ceuta continúa aún sin representación en la ciudad europea.