La obra de reforma del paso fronterizo que desde hace unos meses está llevando a cabo Marruecos no contempla la viabilidad del puente del Biutz. Las autoridades marroquíes han mostrado ya su intención de cerrar el paso apostando por la viabilidad de una vía de tránsito bien distinta a la actual, que fue inaugurada en 2005 con Jerónimo Nieto como delegado del Gobierno. Este hecho, conocido ya por España, supondrá el punto y final al que, en algunos sectores, ha sido bautizado como el ‘paso de la vergüenza’. Los empresarios del polígono del Tarajal también conocen las pretensiones marroquíes pero lamentan la falta de información que tienen sobre cuáles son ellas. Se sabe de su apuesta por otro paso alternativo, se sabe también de la opción que dan a otro tipo de tránsito para los porteadores menos visible que en la actualidad y se conoce de la imposición de algunas trabas para el traslado de determinados productos que ahora sí fluyen, sin problema alguno, entre ambos lados.
En declaraciones a El Faro, los empresarios del polígono lamentan ese desconocimiento y protestan, como lo han hecho en esta semana, por la ausencia de defensa que tienen, por la descoordinación que hay entre ambos lados y por las repercusiones que dicha descoordinación tiene en sus propios comercios.
En Melilla ya se conoce de forma oficial la puesta en marcha de un nuevo paso fronterizo por el que circulará la mercancía. Esta información, aplaudida esta misma semana por el Ministerio del Interior, es la que los empresarios del Tarajal quieren que se produzca en Ceuta. Los comerciantes denuncian que la situación va cada vez a peor, que sienten que nadie les defiende y que terminará generando problemas para todos los que tienen algo que ver con el comercio que se centraliza en las naves: clientes, empresarios, porteadores e incluso policías.
El cierre del paso fronterizo de Biutz pretendido por Marruecos se ejecutaría una vez terminan las obras de adecentamiento fronterizo que se acometen ahora.
Cuatro años después de la muerte de Bushra y Zoora, la situación en el polígono del Tarajal sigue siendo igual de tremendista
El 25 de mayo de 2009 fallecían en la ya denominada escalera de la muerte las marroquíes Bushra y Zoora. Las dos murieron aplastadas después de que se produjera una avalancha provocada. Hoy, cuatro años después de una tragedia en la que no hubo responsabilidad penal alguna (el caso quedó archivado), los empresarios del Tarajal recuerdan que la situación sigue siendo igual de tremendista, con riesgos para las cientos de personas que se acumulan en el polígono a pesar de los protocolos aplicados.