La Dirección General de Seguridad Nacional de
Marruecos ha comunicado que eliminará del documento que hasta ahora se pedía para salir y entrar de sus fronteras, ya fuera por aire, mar o tierra, una medida que entrará en vigor este lunes 16 de septiembre y que también afecta a su frontera con Ceuta. Con esta nueva medida Marruecos pretende acelerar el ritmo de viaje en su territorio, ya sea en los aeropuertos y puertos del país, así como las fronteras terrestres, entre las que se incluyen los dos pasos fronterizos de Ceuta y Melilla. Los oficiales de la seguridad marroquí desplegados en la frontera ya no tendrán que revisar este formulario, también llamado "ficha policial", que había que rellenar y que servía como pase y salida a Marruecos, lo que retrasaba considerablemente todos los trámites burocráticos. Desde este lunes, solo será necesario entregar el pasaporte con la consiguiente revisión de los datos de la persona, aunque en los puertos aún se seguirá trabajando con este formulario durante los dos próximos meses, el tiempo que se estima que tardaran en adaptar sus infraestructuras a este nuevo escenario. Esta medida irá acompañada de un nuevo sistema de identificación, consistente en una lectura automatizada de los pasaportes de los viajeros, explicaron fuentes policiales a EFE. Hasta ahora, cualquier ciudadano que quisiera entrar o salir de Marruecos, ya fuera por aeropuerto (el más cercano a Ceuta, el de Tánger, es utilizado por muchos ceutíes), por puerto o por carretera tenía que entregar un formulario rellenado previamente que se debía adjuntar junto al pasaporte. En la ficha, que ha estado vigente varias décadas, el viajero debía hacer constar su identidad, fecha y lugar de nacimiento, nacionalidad, profesión, número de pasaporte y fecha de expedición, además del lugar de residencia dentro de Marruecos. Una vez completa, la ficha era recogida por un agente de la policía, y solo entonces estampaba el sello de entrada o salida en el pasaporte. A partir de este lunes, este documento no será pedido, y para entrar y salir a Marruecos, también en la frontera terrestre que tiene Ceuta con el país vecino, solo hará falta entregar el pasaporte, que debe tener una vigencia no inferior a seis meses. Todo ello se hace también dentro de una estrategia turística, ya que Marruecos aspira a duplicar su número actual de visitantes (unos diez millones), aunque la fecha marcada como meta para alcanzar esta cifra, el año 2020, ya no será suficiente.