Tras negar la autenticidad de este documento, el ministerio subrayó que se trataba efectivamente de una falsificación, explicando que este tipo de mentira ya había sido difundida por un sitio web marroquí que había atribuido esta información a lo que denominaba "controladores de mezquitas" en la región de Tánger.
"Dado que esta información carece de fundamento, el citado sitio se comportó como si estuviera prediciendo lo que debía ocurrir. Como tal acto no tendría ninguna consecuencia, el Ministerio decidió no reaccionar", explica la misma fuente.
El Ministerio advirtió a los responsables religiosos contra "la existencia de estas personas, que intentan socavar una nación famosa por su apego a la ley, a la causa palestina y a la mezquita de Al Aqsa, tanto en el pasado como en el presente".
El Gobierno del reino también calificó este tipo de comportamiento de "fracaso de la política" y de "crimen contra la religión".
Las pesquisas continúan después de que el Ministerio de Habices y Asuntos Islámicos negara el lunes la autenticidad del documento que se le atribuía, deplorando que algunos usuarios de las redes sociales hubieran difundido un documento que contenía instrucciones dirigidas a los delegados del ministerio prohibiendo a los predicadores mencionar Palestina en las mezquitas.