Mientras los Reyes Magos repartían caramelos por las calles de Ceuta, a escasos kilómetros de ahí, en el mar, varios grupos de menores intentaban bordear a nado el
espigón del Tarajal con la clara intención de pasar desde Marruecos a la ciudad autónoma. Uno de ellos fue un joven, de origen egipcio, que ayudado de un marroquí que terminó siendo detenido por la Guardia Civil acusado de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, pasó.
Este episodio ocurría entre las ocho y media y las nueve de la noche, cuando el ‘motor humano’, dotado con aletas y chaleco salvavidas, ayudó a entrar en Ceuta a nado al mencionado adolescente. Fue en ese momento en el que los guardias civiles operativos procedieron a interceptar al menor y a detener al marroquí antes de que huyera de regreso a su país.
No fue el único servicio asociado a la inmigración ocurrido en plena celebración de la Cabalgata. Y es que en total fueron 9 los inmigrantes interceptados, de los que seis manifestaron ser menores de edad, de entre 15 y 16 años. A ellos se sumaron otros de entre 20 y 30 y uno que rozaba la mayoría de edad sin quedar definido si había cumplido los 18 o no.
Los inmigrantes eran de nacionalidad marroquí pero también constan de Sudán y este adolescente egipcio.
Todos fueron interceptados por la
Guardia Civil y trasladados a la base de la compañía fiscal para el trámite de la documentación y la asistencia pertinente por parte del ERIE de
Cruz Roja en cumplimiento del protocolo existente.
Los menores serán acogidos en el centro de Piniers mientras que en el caso de los adultos había que comprobar sus identidades para valorar si cabía una devolución a
Marruecos. En el caso del único detenido será presentado ante la autoridad judicial en las próximas horas.