La reducción del número de plazas para la Guardia Civil con motivo de la menor oferta pública de empleo aprobada por el Gobierno ha generado un malestar notorio entre las familias de los jóvenes que se estaban preparando para acceder al Instituto Armado. Y esto así porque quienes se están formando en el colegio de ‘Guardias Jóvenes’ de Valdemoro ya no podrán disponer de una salida laboral segura, como antaño, cuando prácticamente el 90% de estudiantes terminaba consiguiendo una plaza en la Benemérita. Este año tan sólo se han ofertado poco más de 200 vacantes de las que no más de treinta terminarán en manos de estos jóvenes.
La crítica no se ha hecho esperar y mientras las asociaciones vinculadas a la Guardia Civil estudian lo sucedido, las familias han mostrado ya su pesar por el futuro incierto que les depara a quienes ya se están preparando para engordar los números de la Benemérita. Así lo han trasladado a ‘El Faro’ un grupo de estos padres representantes del importante grueso de jóvenes ceutíes que termina viendo en la Guardia Civil su futuro laboral y en concreto, en el colegio de Valdemoro, la escuela de su formación.
El gasto desembolsado por las familias puede caer en saco roto, a tenor de la situación generada. Esto ha provocado que asociaciones como la AUGC se hayan puesto en contacto con la dirección general para intentar solucionar una problemática que mantiene en vilo a muchas familias ceutíes.
En una carta oficial remitida por la asociación al director general se alude a la cantidad de jóvenes que “el pasado año realizaron las pruebas de selección para el Colegio de ‘Guardias Jóvenes’ donde hijos de guardias civiles se prepararon para acceder a nuestro querido y entrañable Colegio”, señalan. “La selección como alumnos en el mismo crea unas posibilidades importantes para estas personas porque después de la etapa de formación, la mayoría de los ‘guardias jóvenes’ logra superar las pruebas e incorporarse a la etapa de formación como guardias alumnos. Esta primera etapa está llena de sacrificios no sólo para los alumnos que deben superar el exigente plan de estudios, el rigor y la disciplina del Centro, sino también para las familias cuyo coste del curso es elevado”, apunta la AUGC. La limitación de plazas marcada por la restrictiva oferta pública de empleo provoca una merma “exagerada” en la posibilidad de ingreso en el Cuerpo; eso sin contar, recuerda la asociación, “la desmoralización de los alumnos, porque accedieron al Colegio con unas expectativas, ahora imposibles”.
De la cantera de Valdemoro se ha nutrido la Guardia Civil cuando por distintas razones la sociedad no respondía a las expectativas de ingreso que los distintos gobiernos planteaban. Ahora, la crisis ha dado la vuelta a la tortilla y las expectativas de las familias ceutíes han variado.