La Ciudad, a través de la Dirección General de Educación, ha dado luz verde a los trabajos de conservación y mantenimiento que es necesario realizar en la cubierta de la primera plana del colegio público Rey Juan Carlos I, en Ceuta.
Los costes de estos trabajos ascenderán a 53.000 euros y los ejecutará Multiservicios Buildarna.
Desde hace algunos años, cada vez que llueve, la cubierta de la planta baja padece filtraciones que se manifiestan en el pasillo distribuidor de la planta baja deteriorando el revestimiento del techo.
“Estas filtraciones, a pesar de las múltiples reparaciones puntuales que se han realizado con parcheos de tela asfáltica, se siguen produciendo, y unas cantidades que abarcan múltiples zonas del salón. Las humedades son de tal calibre, que las que se producen en el pasillo han llegado a estropear el enfoscado del techo, dejando las bovedillas al descubierto”, se redacta en el proyecto.
Plazo de ejecución
Una vez los técnicos han inspeccionado la cubierta, se ha comprobado que se trata de una cubierta invertida “con acabado de grava suelta”, en la que resultad “imposible comprobar cualquier fallo”.
La sustitución al completo de la cubierta
Un motivo que ha llevado que se tenga que buscar una solución drástica para definitivamente resolver el problema y ha sido la sustitución al completo de la cubierta existente y realizar una nueva cubierta con aislamiento térmico.
El plazo de ejecución para las obras descritas será de 3 meses contados a partir de la firma del contrato. Las obras de impermeabilización de la cubierta tendrán un plazo de garantía de 5 años, durante los cuales, si se produjeran humedades en el techo, la empresa adjudicataria se compromete a las reparaciones necesarias sin coste alguno. Para las pinturas de paramentos interiores el plazo de garantía será de 2 años.
Entre los trabajos que se tendrán que desarrollar serán: Levantado y retirada de la capa de grava que conforman el acabado de la cubierta. Picado y saneado hasta el ladrillo de los pretiles de la cubierta y de las cuatro chimeneas de ventilación.
Además, los operarios tendrán que dejar la tela asfáltica existente a modo de barrera de vapor. Para mejorar todo, los trabajadores realizarán una nueva formación de pendientes con mortero de cemento aligerado con arlita, así como una junta perimetral de dilatación realizada con ladrillo hueco.
Posteriormente, los operarios tendrán que sustituir las cazoletas de los sumideros, previa apertura del forro del bajante para su correcta conexión.
Por último, se llevará a cabo la impermeabilización bicapa de la cubierta para acabar con la problemática.
Los operarios decidieron realizar estas obras, una vez inspeccionaron la cubierta, ya que se trata de una cubierta invertida “con acabado de grava suelta”, en la que resulta “imposible comprobar cualquier fallo”.