Siguen produciéndose asesinatos. Mujeres víctimas de la violencia machista que, en algunos casos, habían denunciado previamente a sus maltratadores. Lejos de lograr un control sobre esta lacra los casos van a más, precisamente en unos tiempos en los que hay recursos y campañas publicitarias suficientes. Algo sucede para que sigan produciéndose quiebras que se traducen en asesinatos.
Delegación guardaba un minuto de silencio ayer para testimoniar su pesar por la muerte de una vecina de Murcia de 50 años. Existían denuncias previas por violencia de género. La sede de la administración central acogió la lectura institucional contra este tipo de violencia.
Más allá de discursos hay que profundizar en los fallos, porque algo sucede para que sigan muriendo mujeres y aumenten los casos asociados a esta violencia.
Casos que, además, se producen en mujeres cada vez más jóvenes y que no habían denunciado lo que sufrían en silencio a pesar de las cuantiosas campañas informando sobre qué hacer y a dónde acudir.
Con unidad y firmeza se debe combatir esta violencia, pero sobre todo con un estudio claro sobre lo que está fallando y las medidas correctoras que deben emprenderse para poner un veto a este tipo de situaciones extremas.