Los vecinos, indignados por el derribo de la escalera, exigen una solución

El derribo de la escalera del Tarajal ha suscitado una gran indignación entre los vecinos de Príncipe Felipe, Arcos Quebrados, Casas Nuevas y Príncipe Alfonso, quienes se sienten víctimas de una actuación que tiene como objetivo vetar el paso de porteadores por el colegio.

“Todas las familias estamos pagando las consecuencias de los porteadores”, lamentaba un residente de la zona en una conversación con este medio junto a la escalera demolida.
El derribo de esta escalera obliga a los vecinos a dar una gran vuelta para bajar al Tarajal. Una de estas rutas es por un camino de tierra que cuando llueve se convierte en barro, mientras que el otro es por una carretera que no tiene acerado en uno de sus laterales. Tener que tomar uno de estos caminos para llegar a sus casas o para bajar al Tarajal supone una molestia para unos vecinos que antes con la escalera apenas tenían que recorrer unos metros para llegar a su destino.
Además de los vecinos de estas barriadas que tendrán que dar la vuelta para llegar al Tarajal, dos de los colectivos más afectados son los jóvenes estudiantes que residen en esta zona y tienen que coger el autobús para ir al instituto, o los niños que vienen con sus padres desde Marruecos para ir al colegio. También dicen que esta escalera es utilizada por médicos del centro de salud y que ahora tendrán que elegir un camino alternativo.
La indignación aumenta aún más cuando han recibido la noticia, según dijo uno de los vecinos de la zona, de que la escalera de arriba, la que se encuentra junto al colegio, también será demolida. Y es que de esta manera sólo un camino conectaría el lugar en el que viven con su destino: el sendero de tierra. “Si ocurre una emergencia, ¿sacamos a la persona afectada en carretilla?”, se preguntaban. Además, entienden que con el derribo de la escalera no evitarán que pasen los porteadores y que lo seguirán haciendo pero por el barranco que se ubica junto a esta.
Estas personas recuerdan que las cuatro familias que residen en este lugar están formadas por unas 30 personas, de las que 17 son niños de entre 3 y 9 años que están escolarizados en el CEIP Príncipe Felipe y que si la escalera de arriba también es derribada tendrán que dar toda la vuelta para llevar a sus niños al colegio.
Las personas que en la mañana de ayer se congregaban junto a la escalera aseguraban que habían visto caer por este lugar a algunas personas que habían intentado bajar. “Antes teníamos una escalera y ahora tenemos un barranco”, lamentan, para añadir que existe otro peligro: que la escalera cuyo extremo más bajo se encuentra derribado no está señalizada y que por la noche se pueden producir más caídas. Así las cosas, los vecinos consideran que “primero se debería haber buscado la alternativa y después actuar” y piden que se normalice la situación de manera inminente por el bien de los vecinos, escolares y otros transeúntes.

“Se ha cortado un camino que es un bien común”

El presidente de la Asociación de Vecinos Príncipe Felipe, Said Mohamed, lamentó ayer en declaraciones a este medio que se ha cortado un camino que es un bien común para los vecinos y para todas las personas que diariamente transitan por esta zona. “No entendemos por qué Delegación actúa de esta manera”, añadió. En relación al camino que tienen que seguir muchos vecinos para llegar del Príncipe Felipe al Tarajal, advirtió de que es “largo y peligroso”. Así, pide que se habilite un lugar por el que los vecinos y los demás transeúntes puedan hacer el recorrido que han venido haciendo hasta ahora sin tener que sortear peligros. En esta línea, exige que se busque una solución a una medida que considera “injusta”.