El ya conocido como ‘expediente Benzú’, para la recuperación posesoria del dominio público marítimo-terrestre que ocupan varias viviendas en la costa de la Bahía Norte, se inició el 25 de noviembre de 2013 después de que el Servicio de Vigilancia de Costas del Área Funcional de Fomento
informara de la presencia de estas edificaciones en la zona del vigente deslinde aprobado por Orden Ministerial de 29 de mayo de 1985, el cual no es reconocido por los perjudicados.
Una reclamación del territorio sobre el que se elevan estas construcciones para que este espacio cumpla con su finalidad: ser libre, público y gratuito para el conjunto de la población. Tras meses de notificaciones de los actos, trámite de alegaciones y audiencia respetando las garantías propias del procedimiento, la Delegación del Gobierno resolvió declarar el archivo de los expedientes por caducidad de los mismos el 6 de febrero, y por tanto, calmó el temor de los vecinos al derribo de sus casas. Aunque la normativa específica que regula este procedimiento administrativo no prevé plazo de resolución, el Gobierno de la Plaza de los Reyes acudió al general, que es de tres meses.
De los 13 expedientes abiertos, que afectarían a 25 familias según la Plataforma de Afectados de Benzú, cuatro de ellos se encontraban en fase de recurso administrativo en Madrid cuando la Delegación del Gobierno procedió al archivo del caso. Estos recursos de alzada obran en poder del Ministerio de Medio Ambiente, cartera que se encarga de su tramitación.
En el caso de uno de ellos, entre diciembre y enero de este año y por tanto, en plena tramitación del expediente de recuperación posesoria con orden de demolición a costa, en principio, del interesado, los servicios de la Delegación del Gobierno detectaron una ampliación de la edificación, siendo denunciado conforme a la Ley de Costas el promotor de la obra. Según el vigilante de Costas, resultó ser el padre del anterior y que, según las mismas fuentes, se encuentra empadronado en Pasaje Recreo Alto.
La Administración aprecia pretensión de disfrutar de un realojo en una “clara treta” para aumentar el número de moradores para, en el futuro, formar parte de las listas de nuevos adjudicatarios de viviendas públicas cuando la Administración se haga cargo de estos residentes, “cuando deba derruir lo ilegalmente construido para recuperar la posesión”. Susana Román, consejera de Fomento, anunció a mediados de febrero que los vecinos de Benzú contarían con unas 30 o 40 viviendas para el realojo de las familias afectadas por las posibles demoliciones.
Consultado sobre el contencioso, el titular de la vivienda que interpuso uno de los cuatro recursos de alzada reconoció que su padre suele tener sus efectos para pescar en el sótano de su casa, el cual da al mar y frecuenta a menudo. Sin embargo, insistió en desvincular ambas cuestiones. “Por un lado está el expediente por el presunto incumplimiento de la Ley de Costas que esperamos que se resuelva en el mismo sentido que el resto y, por otro, la multa que le pusieron a mi padre por levantar un muro en la parte trasera de mi domicilio”, declaró este vecino de Benzú.
El verdadero inquilino del inmueble explicó que Fomento sancionó a su progenitor con una multa de 3.000 euros, importe al que no puede hacer frente puesto que está desempleado y por lo que ha recurrido. Pero, bajo ningún concepto, “se trata de una nueva vivienda”, reiteró. Entonces, ¿por qué se levantó ese espacio? Según el hijo del promotor de la modificación, “porque se cuelan inmigrantes y aunque siempre han huido cuando los descubrimos, nunca se sabe si alguno puede ser violento”. Algunos familiares que se encontraban presentes, llegaron a recordar la ocasión en la que sorprendieron a cuatro asiáticos cambiándose de ropa el verano pasado. Además, la proximidad de las olas en invierno contribuyó a esta decisión, añadió el hijo.
“Las obras superpuestas a las edificaciones construidas fuera de los lindes, y sobre los que se actúa directamente (cuatro casos), continúa con cierta regularidad”, comunicó Costas, por tanto considera que los “recrecimientos sobre los primitivos cimientos son una constante”.