Las comunidades de adjudicatarios recuerdan que no sólo es un asunto económico sino de servicios comunitarios
Cerca de dos semanas después, la comunidad de propietarios plazas, locales y trasteros de Bermudo Soriano, Plaza Azcárate y el Polígono Virgen de África no ha recibido aún una respuesta ala petición de reunión propuesta. Así lo revelaron fuentes de las citadas comunidades de adjudicatarios: “Lo enviamos el 29 de septiembre y, hoy [por ayer], 11 de octubre, aún no hemos recibido una respuesta del Ayuntamiento por la que pedíamos una reunión con el presidente, Juan Vivas, y con el consejero de Haciendo y Recursos Humanos, Paco Márquez”.
La citada misiva en la que se demanda una petición de vista con los representantes del Gobierno de la Ciudad surgió tras la reunión mantenida entre los propietarios de las tres comunidades de adjudicatarios, cuya voz fue unánime: “Queremos comprar, pero no por el dinero que nos pide la Ciudad”. Esa era la contestación a la resolución de enajenación firmada por la Consejería de Hacienda y Recursos Humanos.
Tras la reunión de titulares de los locales y la posterior difusión de su mensaje, llegó la respuesta de la Ciudad. La compra no es obligatoria, declararon, pero sí abonar el canon, “incluidas las deudas” acumuladas a lo largo de los años.
Al pesar que le supone a las comunidades de propietarios la no resolución del conflicto sobrevenido, se suma un lamento, el de que desde “el Ayuntamiento solo ha analizado la vertiente económica y no se parado a discernir que hay unas 500 familias afectadas que desean solucionar los aspectos comunitarios relacionados con la enajenación de los locales”, afirmaron las fuentes de los propietarios. “Nos quejamos de los precios desmesurados, cierto, pero no solo es una cuestión de vender sino los servicios comunitarios de medio millar de vecinos a quienes creo que desde el Ayuntamiento debe oír”.
El Presupuesto de Ingresos de la Ciudad para este ejercicio prevé que la Administración se embolse un total de 2,6 millones de euros por la venta de estos garajes y locales tras la tasación de cada uno de ellos “por debajo de los precios de mercado”.