Ponerse al volante de un taxi para intentar ganarse la vida se ha convertido en las últimas semanas en una profesión de riesgo en Ceuta.
El mensaje lo lanzaban ayer los tres colectivos profesionales que agrupan al sector (Asociación de Autónomos del Taxi, Sociedad Cooperativa del Taxi y Asociación Profesional del Taxi) en un comunicado conjunto en el que denunciaban el clima de inseguridad en el que se ha sumido su actividad. Además, anunciaban paros y protestas si no se impulsan medidas que frenen la oleada de robos que padecen.
En el último mes han sufrido tres intentos de atraco a punto de pistola. Los dos primeros no trascendieron porque, por distintos motivos, las víctimas decidieron no interponer denuncias. El último se produjo a las 3:30 de la madrugada del domingo al lunes. Un individuo solicitó un taxi en la barriada de Los Rosales, se subió a él y pidió al conductor que le trasladara hasta Varela. Al llegar a la explanada situada junto al Polideportivo ‘La Libertad’, el supuesto cliente, que viajaba en el asiento trasero, le colocó al taxista –el titular de la licencia número 48– una pistola en la cabeza y le exigió la recaudación. Éste se revolvió, logró librarse del arma y consiguió que el atracador abandonara el vehículo mientras gritaba pidiendo ayuda.
José Luis Mercado, presidente de Radio Taxi, confirmaba a El Faro que agentes de la Udyco visitaron ayer la cooperativa en busca de pruebas que conecten el caso con los otros dos y certifiquen que se trata del mismo delincuente. “Estamos sufriendo la inseguridad y queremos dar un toque de atención a las autoridades. Durante un tiempo hemos estado tranquilos, pero nos ha vuelto a tocar otra vez”, lamentaba, para insistir en las posibles protestas: “Si esto sigue así, organizaremos un paro de todos los taxistas”.