Durante las dos últimas semanas, las Unidades ubicadas en la Plaza de Ceuta superaron el Test General de la Condición Física (TGCF), en el Regimiento de Ingenieros nº 7.
Estos ejercicios físicos se realizan anualmente y se desarrollan de forma escalonada del 03 al 14 de marzo (lunes a viernes).
El calendario para la realización de las pruebas fue establecido a principios del año en curso por la Junta de Área de Educación Física de la Comandancia General de Ceuta.
Este organismo distribuyó las jornadas dedicadas a las pruebas entre las diversas Unidades para evitar la aglomeración de todos los militares destinados en Ceuta, durante un mismo día.
El TGCF consiste en una serie de pruebas y ejercicios cuya superación certifica la aptitud física de los militares en activo y cuya superación es imprescindible para el desarrollo de su vida profesional (destinos, cursos, ascensos, comisiones, misiones en el extranjero, de paz, etc.).
Al margen de otras competiciones deportivas, estas pruebas físicas tienen la singularidad de establecer para cada ejercicio las marcas que deben superar, según el sexo y la edad de los participantes.
De esta forma, a cada militar se le exige un esfuerzo según su edad; así por ejemplo a los que tienen entre diecisiete y veintiún años de edad (encuadrados en el grupo 1) se les exige más esfuerzos y a los que superan los sesenta y dos (encuadrados en el grupo 14) se les requiere un menor esfuerzo para obtener los mismos puntos y de igual modo el personal femenino tiene distinto esfuerzo y puntuación.
Para superar el Test General de Condición Física es necesario sacar un mínimo de 20 puntos en cada prueba indistintamente de la edad o sexo (según se específica en las diferentes tablas que hay para cada prueba).
Esto no es una competición y no existen ni ganadores ni perdedores y sólo es válido para que los evaluadores de la Junta de Área de Educación Física anoten las marcas conseguidas por cada uno de los participantes y de esta forma poder extender los certificados acreditativos que posteriormente se adjuntarán al expediente personal de cada individuo.
La primera prueba es el Circuito de Agilidad-Velocidad (CAV) y en ella lo que se evalúa es la capacidad de realizar cambios de dirección y posición, coordinados y con rapidez (velocidad, agilidad y coordinación).
La segunda prueba a realizar, evalúa la Fuerza-Resistencia de las Sinergias Musculo-Articulares de Tronco, Cintura Pélvica y Cintura Escapulo-Humeral (Flexiones de Tronco), donde se encuentran los Abdominales y se desarrolla en un tiempo de tres minutos.
La tercera prueba consiste en la realización de Flexiones de brazos en el suelo y evalúa la capacidad de vencer una resistencia media durante un tiempo máximo de dos minutos (Fuerza-Resistencia de la musculatura del Tren Superior).
Por último se encuentra el recorrido de 6000 m lisos, donde la principal cualidad a evaluar es la capacidad funcional del sistema cardiovascular (Resistencia aeróbica) y la fuerza-resistencia de la musculatura del tren inferior.
Esta prueba se realiza habitualmente en la carretera de Benzú desde el km 3 hasta el km 6 ida y vuelta.
La puntuación final de cada militar, ajustada a las marcas mínimas exigidas (20 puntos), se establece una “Nota” con la media de los puntos obtenidos en las 4 pruebas.
Cada prueba dispone de un jurado encargado de comprobar el buen desarrollo del ejercicio.
En las pruebas de fuerza, tanto de flexiones de brazos en el suelo como flexiones de tronco (abdominales), los controladores supervisan que los ejercicios se realicen tal y como marcan las normas.
En la prueba de velocidad (Circuito de Agilidad-Velocidad) (CAV) se establece un controlador por cada uno de los corredores y es el encargado de anotar el tiempo empleado por cada participante.
Para las carreras de resistencia, la salida se produce a la vez para todos los corredores y en este caso los controles se realizan dos veces durante el recorrido, esto es en el ecuador del trayecto (donde se encuentra una cámara grabando los dorsales que muestran los corredores) y al finalizar.
El certificado que cada militar obtiene por la realización del Test General de la Condición Física tiene una validez de un año y es de extraordinaria importancia por tratarse de uno de los documentos que, de forma obligatoria, deben adjuntar junto a los impresos necesarios para diversos trámites, como pueden ser la asistencia a cursos organizados por el Ministerio de Defensa, imprescindible para los ascensos de empleo, para las enseñanzas de formación y perfeccionamiento e incluso en ocasiones, para la solicitud de vacantes.