“Hemos iniciado la tramitación con Función Pública para el nombramiento como funcionarios interinos de los orientadores en Ceuta y Melilla”. Este es uno de los compromisos que dice el Gobierno de la Nación que se ha alcanzado. Lo deja por escrito en un documento manejado en la Comisión Permanente del Comité de Seguimiento del Plan de Choque por el Empleo Juvenil, a cuyo contenido ha tenido acceso El Faro y en el que se cita ese punto entre varios más informados por el SEPE. Lo destacado o preocupante, además de llamativo, es que en Ceuta no existe la figura del orientador. ¿Cómo entonces se asegura en dicho documento que se ha iniciado ya la tramitación para su nombramiento nada menos que como funcionarios?, ¿a qué personas se refiere cuando esos puestos hoy por hoy no existen? Es imposible que se haya podido iniciar una tramitación para un nombramiento de personas que no figuran, salvo que se pretenda cubrir esas plazas de alguna manera extraordinaria. La única forma legal y transparente de hacerlo sería a través de una convocatoria de empleo que no se ha llevado a cabo, a la que se tendría que tener un acceso por igual. No se han creado plazas nuevas, ni se ha dado a conocer estrategia de favorecimiento de empleo pero, sorprendentemente, se confirma como un hecho objetivo que se ha iniciado ya esa tramitación. Nadie ha dado explicaciones oficiales al respecto. El asesoramiento es ejercido en la actualidad por trabajadores externos. Otro de los asuntos que afectan a las dos ciudades autónomas es la alusión a que se ha “diseñado y presupuestado en el PAPE 2019 dos Planes Integrales de Empleo”, algo que sí es un hecho.