Los plenos se han convertido en un verdadero circo y como tal hacen parecer que en su inmensa mayoría de quienes en ellos participan son verdaderos payasos. Claro está, no todos, pero alguno mas que otro dan esa sensación, y yo creo que al ciudadano se le debe un respeto, pues cuando los ponen ahí con sus votos, es para que le den soluciones a sus problemas cotidianos y no para dar el espectáculo.
Pero como se ve algunos tratan de protagonizar un pleno si y otro también, ser la estrella del circo y lo penoso es que hasta alguna vez lo consigue, y más por sus payasadas que por buscar soluciones reales, sino miren como tratan el tema de los Menas, algunos diputados lo llevan como si se estuviera persiguiendo a modélicos colegiales cuya única misión fuese el formarse para un futuro mejor, y claro eso a estas alturas ya no cuela. Aquí se ha invertido mucho dinero con unos resultados negativos, a los hechos me remito.
Desde que se instaló a estos MENA en una instalaciones en las inmediaciones de San Antonio, hasta el actual centro de la Esperanza de Hadú, lo único que se ha conseguido ha sido un efecto llamada brutal, consiguiendo que la inmensa mayoría de estos MENA estén todo el día pululando con total libertad por toda la ciudad, siendo su única intención, la de intentar cruzar el estrecho y hasta que lo consiguen crean una inseguridad allí por donde aparecen. Esto es así y por mucho que algunos con su fácil verborrea tratan de sacar dialécticamente provecho para sus fines políticos, siguen sin ofrecer soluciones reales.
De hecho si esos que se la van dado de mentes preclaras, son tan listos, que expongan qué harían con esos MENA que están todo el día creando problemas en la zona portuaria, pues si son ellos quienes tienen la solución que la expongan y que se estudie si es factible su aplicación, y si es así el ciudadano les estará eternamente agradecido, de no ser así mejor que se calle y se vaya a su casa hacer algo más productivo.
Y si de ahí nos vamos al tema de la casas ilegales, ya es para llorar, es incompresible que un representante del pueblo pueda salir diciendo que se legalice algo que es ilegal, pues esto dicho en una Asamblea que es la institución donde se representa a los ciudadanos cumplidores con las normas y la ley, carece de toda lógica y razón de ser.
Lo que algunos sirviendo oscuros intereses pretenden es que alguien que se ha apropiado ilegalmente de un terreno que no es suyo y ha edificado en él, por una política de hechos consumados, no solo se le exima de un delito, sino que además se le premie por ello. Si eso se consiente a partir de ahí entramos en una dinámica que nos llevará a cotas imprevisibles y totalmente indeseadas.