Los directores de los centros de Educación Infantil y Primaria de la ciudad terminaron de consensuar ayer un escrito dirigido a la Dirección Provincial del Ministerio de Educación y la Asamblea para, de forma “serena y sosegada” pero firme, “estimular la conciencia del MECyD y del Gobierno de la Ciudad en orden a la mejora del sistema educativo”.
“La situación de crisis generalizada y las consiguientes restricciones presupuestarias están agravando esta situación, reduciendo la capacidad de maniobra de los centros, incluso para improvisar, y complicando en exceso la solución de los problemas”, alertan.
Los directores denuncian que “las plantillas están diseñadas de manera arbitraria” y que sería preciso “establecer una estructura para cada centro con criterios homogéneos a partir del número de grupos, la ratio de alumnos y el grado de dificultad del desempeño docente”.
A la Ciudad se le pide que “revise” las cantidades que destina al mantenimiento de los centros y al Ministerio que efectúe “con regularidad” las transferencias para comedores. En materia de becas se reclama una política “basada en los siguientes criterios: que sea suficiente, puntual y ágil en la tramitación” porque “lo que ha sucedido este curso es inaceptable”.
También se demanda más personal especializado; plantillas “bien dimensionadas y estables” de servicio; liberaciones para cumplir con el cada vez más elevado trabajo burocrático y una política de escolarización “objetiva y transparente” que equilibre las ratios.