“Lo importante es trabajar con humildad y seguir aprendiendo”

Se fue a Madrid cuando tenía dieciocho años, es decir, hace exactamente cuatro. Desde joven tenía claro que quería ser actriz y también que para alcanzar este propósito tenía que irse a la “meca del cine español”: la capital. Para ello, hizo las maletas con el beneplácito de sus padres y empezó a hacer castings.

Esta joven ceutí, nacida el 18 de abril de 1988, acaba de alcanzar uno de sus primeros objetivos al lograr el papel de protagonista en una serie televisiva como “Gavilanes” de Antena 3, que se estrenó el pasado lunes con 3.374.000 espectadores.
Con la humildad por bandera y las ganas de aprender como principal argumento, Alicia Sanz -que llegó a ser Miss Ceuta en el 2007- tiene las cosas muy claras en el sentido de que quiere seguir subiendo peldaños en una escalera como la de actriz que reconoce no es nada sencilla debido a la competencia existente en la actualidad. No obstante, sus ilusiones ya se están cumpliendo aunque “esto sólo es un paso”.

–¿Qué hace una joven ceutí tan lejos de la ciudad?

–Actualmente me encuentro grabando en Barcelona. Con dieciocho años me fuí a Sevilla para estudiar Económicas pero al año siguiente decidí trasladarme a Madrid para hacer Arte Dramático que era lo que me gustaba, por lo que me apunté a la escuela Corazza, después de haber convencido a mis padres.

–¿Te sirvió para algo en tu carrera haber sido Miss Ceuta en la edición de 2007?
–Sí, me apunté al certamen a través de mis amigos que me lo aconsejaron ya que en esos momentos me encontraba en Sevilla. Pensaba que podía ser una oportunidad para abrirme paso en este mundo porque siempre he tenido expectativas de irme a estudiar a Madrid puesto que me encanta la interpretación. Creo que acerté de pleno.
–¿Cómo se lo tomaron tus padres esa decisión de hacer las maletas tan joven?
–Creo que no podían hacer nada para retenerme y lo comprendieron ya que era lo que verdaderamente me gustaba, aunque sabían que es muy difícil trabajar en esta profesión pero es lo que me gustaba desde pequeña y por ello he apostado seriamente.
–¿Es vocacional o de tradición familiar?
–Mi tía es cantante y una prima mía está relacionada con el teatro, por lo que faltaba una actriz en la familia y aquí estoy. La verdad es que es un trabajo muy duro
–¿Cómo te proponen hacer uno de los papeles de ‘Gavilanes’?
–Recuerdo que había pasado unos días de vacaciones de navidad en Ceuta y luego me había ido para Granada. Estando allí me llamó mi representante y me comentó que buscaban a una chica para la serie y que yo podía dar el perfíl, por lo que no me lo pensé y me fui a Madrid para hacer una prueba más. En un principio lo afronté como un casting más pero me llamaron para que hiciera otra prueba al cabo de unas semanas, luego pasé otra con el director y finalmente con los personajes de la serie. Fueron días muy intensos pero logré un papel importante y con mucho peso ya que soy una de las tres hermanas Elizondo, mientras que los otros dos papeles de mujeres son para Claudia Bassols y Diana Palazón.
–¿Qué significa este papel en tu carrera?
–Es un paso más, aunque el primero grande que espero sea el primero de muchos más porque hay que seguir trabajando con humildad y seguir aprendiendo poco a poco.
–¿Qué es lo que más ha cambiado este papel en tu trayectoria?
–Por un lado trasladarme de Madrid a Barcelona así como dejar la escuela en tercero porque ya era imposible poder compatibilizar las cosas. No obstante, estoy aprendiendo mucho.
–¿Es la culminación de un trabajo realizado?
–Antes había hecho cosas pequeñas como un personaje secundario en “La pecera de Eva” y sí muchos castings, es decir, llevo tres años de prueba en prueba y estoy siendo muy constante ya que opino que trabajando tienen que llegar los resultados, sólo tienes que confiar en tus posibilidades.
–¿Qué está siendo lo más difícil de los rodajes?
–Todo es un esfuerzo pero se pasa genial. Físicamente se nota porque te despiertas a las seis de la mañana y no paras de rodar hasta las ocho de la tarde, pero todo se compensa con el resultado final ya que tengo la suerte de estar acompañada por un grupo de actores genial.
–De hecho el estreno ya ha tenido su éxito ¿No es así?
–Sí, ha tenido una audiencia de más de tres millones de espectadores y el éxito ha sido importante, principalmente en la comunidad de Andalucía que es donde más se ha visto el primer capítulo. De hecho, en el Festival de Málaga ya tuvo mucha aceptación, siendo la primera vez que pasaba por una alfombra roja.
–¿Cómo se vive en Madrid?
–Estoy en una residencia de estudiantes que es como mi familia porque me han dado mucha estabilidad y he estado muy centrada en mi trabajo. He compaginado los casting con clases de interpretación y canto, lo cual se me hizo más fácil.
–¿Es difícil estar alejada de la familia?
–Sí porque la familia se echa mucho de menos. La serie de Gavilanes se graba en Barcelona, por lo que todavía estoy más lejos pero esta profesión siempre ha sido mi ilusión y creo que todo el esfuerzo vale la pena. Mis padres siempre han confiado en mí  y no han tenido más remedio que asumir que me tenía que ir de Ceuta si quería triunfar.
–¿Te gustan las telenovelas?
–No, pero tengo que dejar claro que la serie ‘Gavilanes’ es un melodrama (risas).
–Por último, una curiosidad: ¿Ya has firmado algún autógrafo?
–Sí, durante el Festival de Málaga que se celebró este mes firmé muchos y me hice fotografías con personas que estaban esperando a la puerta del hotel. La verdad es que la gente ya te conoce y es otro mundo, pero tengo los piés en el suelo. Lo más llamativo es que los espectadores te conocen y se acercan.

“La principal dificultad para que triunfe una ceutí    es el acento, por lo que he tenido que trabajarlo”

ACENTO. En el momento de hablar sobre  las dificultades que puede encontrar una joven ceutí para poder triunfar en una profesión como la de actriz, Alicia Sanz tiene claro que “la principal dificultad es el acento”.
En este sentido, ha reconocido que “al tener un habla andaluz están más restringidos los papeles, por lo que al principio era un bache pero no es un inconveniente ahora porque he trabajado mucho”.
No obstante, sí tiene claro que para triunfar hay que hacer las maletas. “Si no me hubiera ido de Ceuta no podía estar donde me encuentro ahora mismo porque si quieres hacer televisión tienes que irte a Madrid ya que para trabajar en algo serio debes estar en la capital que es donde se mueve todo este mundo, principalmente las productoras”.
En el momento de recordar a Ceuta nos dice que “echo mucho de menos a mi familia, a mis amigos y a la playa del Chorrillo. Ahora que me he trasladado a Barcelona para grabar la serie ‘Gavilanes’ tengo la playa más cerca y me puedo oxigenar un poco”, nos comenta.
Por otro lado, está muy satisfecha de que los ceutíes puedan sentirse orgullosos de tener una representante en la televisión. “El director nos ha comentado que donde más audiencia hubo fue en Andalucía y yo dije que una gran cantidad serían ceutíes”.
Alicia Sanz es la mayor de una familia de dos hermanos -su hermano pequeño estudia Económicas-, su madre es de Ceuta y su padre de La Rioja.
Su infancia la pasó, como ella misma reconoce, en Residencial Don Alfonso y posteriormente se trasladó a Parques de Ceuta, donde residía hasta que marchó a la capital.