El Consejo de Seguridad de Tánger quiere llevar a cabo un nuevo método de trabajo para garantizar la seguridad en la ciudad marroquí y para ello elabora un plan novedoso, denominado como "policía de ayuda", basado en denunciar un caso por teléfono y tener a un equipo de la policía entre cinco y diez minutos en el lugar de los hechos.
Este nuevo método, que tiene como objetivo activar la política de seguridad nacional y dar respuesta de forma más inmediata las comunicaciones de los ciudadanos, tendrá varios pasos, todos ellos dentro de un proceso con el que la ciudad de Marruecos pretende dar más sensación de seguridad y tener más en cuenta la opinión de las personas.
Para ello, y según informa el diario Tanja 24, la policía pondrá un número al servicio de los ciudadanos. Estos, al llamar a ese teléfono, designado exclusivamente para este fin, tendrán la opción de comunicar a las fuerzas de seguridad el suceso. El responsable de la policía deberá también anotar la ubicación del lugar donde se hace la denuncia y la identidad de la persona que hace la llamada.
Tras ello, un policía se dirigirá inmediatamente al lugar indicado. La idea es que lleguen al suceso en un tiempo de entre cinco y diez minutos aproximadamente, es decir, de forma casi inmediata, para así intervenir de la manera más oportuna y eficaz.
Para todo este nuevo proceso se están formando miembros de la división de seguridad de Tánger, con cursos para saber atender a los ciudadanos y estar en contacto con ellos cuando hagan su denuncia, así como la posterior presencia en el lugar de los hechos.
Esto se enmarca dentro de las instrucciones de la Dirección General de Seguridad Nacional, cuyo objetivo es garantizar que los ciudadanos tengan derecho a la seguridad y a una vida digna mediante el establecimiento de una fuerza policial capaz de combatir el delito de manera oportuna y con todas las medidas necesarias.