Crítica de cine a a película Los archivos del Pentágono
Se agarra esta cinta como puede por su supervivencia en la cartelera tras varias semanas de exhibición y sufriendo los empujones de lo más novedoso, cuyo aire fresco siempre atrae más al público. Es por ello que, ahora que todavía tenemos la opción, no se debería dejar pasar la oportunidad de acercarse a ver una gran película de clásico corte político y regusto al mejor cine de esas épocas en las que participar en un proyecto de este tipo era alcanzar las máximas cotas profesionales.
En determinadas ocasiones incluso espera uno ver aparecer al Robert Redford o al Dustin Hoffman de Todos los hombres del presidente… Resulta evidente que nos topamos, hay que saber lo que uno va a ver, con un género muy, muy específico, que se hace bastante cuesta arriba para aquellos que no conecten con él: no estamos ante una excepción a esa regla, quede dicho de antemano para evitar luego que le piten los oídos a quien suscribe por haberla recomendado…
Steven Spielberg firma y produce esta historia rodada como él sabe, con un innegable talento de cineasta de los grandes, trazando con soltura y dominio prodigioso del ritmo (personalmente me sobra algún que otro posicionamiento de cámara, cuestión de gustos) un entramado intrincado y con un puntito escurridizo para el espectador que no ande suficientemente atento.
Además, no cae en esta ocasión el mítico director en la ñoñería sensibloide y aleccionadora de otras ocasiones que ha convertido en marca de la casa, hecho que se agradece especialmente en una historia como esta que se te puede ir a lo patriotero, ultra feminista, ultra reivindicativo, o cualquier otro ultra, que siempre y por definición, excede la cantidad deseable y a veces necesaria de algo.
Estados unidos, 1971
Los hechos nos trasladan al Estados Unidos de 1971, cuando el New York Times y el por aquel entonces modesto Washington Post encabezaron una durísima y valiente pugna con el equipo de gobierno del presidente Nixon en defensa de la libertad de prensa. Ambos informaron sobre el encubrimiento de secretos por parte del gobierno, que había durado cuatro décadas y cuatro presidentes estadounidenses, con información bastante comprometedora sobre la guerra en Vietnam que a los ciudadanos no les gustó en absoluto.
El reparto está encabezado, sobran las palabras, por Meryl Streep y Tom Hanks, una como propietaria del diario de Washington y el segundo como director del mismo. Ambos están a la altura de sus categorías profesionales en unos papeles que también dan la talla. Resultado: nominación al Oscar para ella, elogio generalizado para ambos.
Hay veces que esto del cine tiene poco misterio… Al posible galardón para Streep hay que añadir la merecida nominación a Mejor Película del conjunto de la obra, lo que quiere decir que al menos para Hollywood estamos ante una de las grandes citas butaqueras del año, afirmación que, por cierto y sin acostumbrarse, comparto.
Seguro que Los archivos del Pentágono aún se hace un pequeño hueco a codazos en una pequeña sala, aprovechen que luego pasa la época de vacas gordas y "comienza a hacer frío" en el cine. Winter is coming, que dirían en la tele…