El consejero llega a un despacho que aúna Fomento y Medio Ambiente, unas áreas “vinculadas al desarrollo sostenible” y sobre las que la ley marca el equilibrio “para que no impere una sobre la otra”
El Fomento y el Medio Ambiente le vienen nuevos pero no grandes. Guillermo Martínez deja a un lado el área económica que ha salpicado su carrera profesional y política para ocupar la responsabilidad de dos áreas que se aúnan en una misma consejería que se enfrente a grandes retos esta nueva legislatura. Muchos planes sobre la mesa como el de Residuos Urbanos, el de Ordenación Urbana o el de Desarrollo Energético y de momento, mucha voluntad para que se pongan en marcha.
–¿Cómo se encuentra ocupando el nuevo cargo en estas materias? ¿Está cómodo?
–Fomento, inversión pública, desarrollo urbanístico y medio ambiente están íntimamente vinculados al desarrollo urbanístico por mucho que a algunos no les guste y debe ser así porque el desarrollo urbanístico debe estar vinculado al desarrollo sostenible y es también un área sumamente interesante que incluye muchas cuestiones. Desde el punto de vista de la responsabilidad me siento muy satisfecho y en cuanto a comodidad me encuentro cómodo porque los equipos que hay en ambas áreas son bastante cualificados tanto a nivel técnico como a nivel administrativo y a nivel de implicación. Son áreas muy diferentes pero repito que necesariamente vinculadas porque no se puede hacer un desarrollo urbano sin tener en cuenta la sostenibilidad.
–¿Qué le diría a los que piensan que Medio Ambiente puede quedar supeditado a los intereses de Fomento?
–A esas personas las tranquilizaría diciéndoles que las leyes establecen un equilibrio bastante claro y que yo estoy dispuesto a cumplir las leyes, es decir, ni siquiera la voluntad política te puede hacer marcar, afortunadamente ya, el hecho de que impere más el desarrollo urbanístico sobre el medio ambiental porque la normativa les sitúa en niveles íntimamente vinculados y al margen de toda voluntad política.
–Una de las medidas estrellas de su antecesora en el cargo ha sido el Plan de Residuos. Aún no alumbra. ¿A qué se debe este retraso?
–La ley de residuos que se acaba de aprobar en el mes de julio establecía una serie de parámetros necesarios para el cumplimiento del plan y me parece coherente si hay elementos vinculantes aprobar un plan que esté de acuerdo con esta ley. Una vez en vigor, se debe hacer una revisión del documento que ya estaba elaborado y a partir de entonces se llevará a cabo una exposición pública del documento que permite hacer alegaciones que se resolverán para posteriormente hacer un informe medioambiental y se elevará a Pleno. Si todo va bien preveo que se pueda aprobar a lo largo de la primavera de 2012.
–No han faltado las críticas de la oposición hacia la contratación de la Fundación del Instituto para la Sostenibilidad de los Recursos. ¿Qué tiene que decir?
–Se ha contratado la redacción a una entidad de reconocido prestigio que ha participado activamente entre otras cosas en la redacción de la nueva ley de residuos y que ha sido asesora de múltiples instituciones y comunidades autónomas en materia de medio ambiente. Como es una fundación es una entidad sin ánimo de lucro y le ley de contratos consecuentemente facilita la contratación directa. Al ser sin ánimo de lucro, cualquier tipo de especulación sobra y esta fundación ha colaborado con administraciones de ambos colores políticos.
–Habrá plan en primavera si se cumplen las previsiones, pero aún muchos ciudadanos siguen reclamando en las calles más contenedores. ¿Se pondrán?
–Una de las cuestiones que plantea el Plan de Residuos es el de establecer campañas de concienciación en materia de reciclaje y por supuesto habilitar los medios para facilitar que ese reciclaje sea posible. Ahora mismo se está elaborando un pliego del futuro servicio de recogida de limpieza y mantenimiento de contenedores y la información que tengo, aunque no es un área que llevo directamente se prevé la dotación de nuevos contenedores que faciliten el reciclaje en todos sus ámbitos a los ciudadanos de Ceuta.
–Uno de los grandes secretos es el del Plan General de Ordenación Urbana. ¿Puede desvelarnos algo? ¿Cumplirá con las premisas del equilibrio medioambiental?
–El Plan General de Ordenación Urbana tiene que velar por el equilibrio medioambiental de la ciudad y tiene que contar con el beneplácito técnico del Ministerio de Medio Ambiente y de los servicios técnicos de esta consejería ya que hay que ser escrupulosos con las zonas de especial protección medioambiental, LIC, ZEPA así como en el resto de las zonas de la ciudad. Hay un borrador ya preparado y es cierto que las expectativas de unas elecciones generales nos hacen ser un poco cautos en cuanto a la tramitación definitiva del mismo. Independientemente de que el documento esté en el Ministerio de Vivienda para su análisis y se estén dando pasos, también es cierto que conviene ver el devenir de las elecciones generales para seguir dando pasos en una dirección ponerlo a disposición del que al final tendrá que aprobar este plan ya que definitivamente esa tarea es del Ministerio de Vivienda. En la actualidad se trabaja allí con el documento que se le entregó en abril pero hasta que no se resuelvan las elecciones generales no se darán más pasos.
–Recientemente Septem Nostra denunciaba el problema de la escasez de agua como uno de los más importantes que la ciudad debe resolver. ¿Así lo considera como último responsable?
–El agua evidentemente es un recurso escaso que requiere de la máxima concienciación y de la mejor actuación posible pero también conviene recordar como estabala situación de la producción y distribución del agua de Ceuta hace once años y como está hoy y evidentemente los avances en esta materia han sido muchos cuantitativa y cualitativamente hablando y es fruto de la colaboración, y no me duelen prendas en decirlo, de ambas administraciones. Afortunadamente hoy, salvo aisladas ocasiones en las que se producen averías, existe un suministro de 24 horas de agua para todas las áreas de la ciudad, circunstancia que no se producía hace once años. Se implantarán dos nuevos módulos en la desaladora y definitivamente será imposible quedarnos con agua. Hablaríamos de algo catastrófico: que dejasen de funcionar los seis módulos y que los pantanos se quedaran secos para volver a recurrir al suministro exterior de agua potable. Se han invertido millones de euros en las mejores de la red de abastecimiento y en los últimos dos años las pérdidas se han reducido más de un 30%. Queda mucho que hacer pero afortunadamente estamos dentro de los estándares medios de pérdidas que puede tener cualquier ciudad de España. En el ámbito de saneamiento también s han hecho múltiples inversiones, siendo la EDAR la más importante de todas que en principio se pondrá a funcionar a lo largo del otoño y que una vez haya pasado los seis meses de prueba la gestión pasará a la ciudad autónoma y se resolverá definitivamente el problema de las aguas residuales y los vertidos al mar. Queda mucho por hacer en materia de abastecimiento y de saneamiento con la reposición y cambio de tuberías en algunos casos centenarias pero también es verdad que mis antecesores han hecho un buen trabajo en esta materia.
–¿Para cuándo una mejora en el colector del Paseo de la Marina?
–Esa es una de las cuestiones que faltan entre otras muchas. En la actualidad estamos centrando esfuerzos con la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, es la de la modificación y mejora del anillo de abastecimiento y saneamiento de las barriadas de Príncipe Alfonso y Príncipe Felipe con una inversión de 18 millones de euros y que cuenta con esta cofinanciación y que esperemos se termine en los próximos meses. También la puesta en marcha del quinto y sexto módulo de la desaladora y mejoras en la red de abastecimiento y saneamiento.
–La dependencia energética de Ceuta es evidente. ¿Va en su mandato a favorecer medidas de ahorro energético?
–Se está redactando un pliego de condiciones para el mantenimiento de alumbrado público y la red de suministro. Se hace con el Ministerio de Industria y Energía y trae consigo un ahorro energético al introducir iluminarias con menor consumo energético y desde la consejería se han puesto en marcha medidas para controlar este consumo energético. Son pequeñas, pero que llevan a cosas grandes y que pueden ser la necesidad de hacer fotocopias por las dos caras, establecer horarios en materia de aire acondicionado y de gasto de luces. El pliego saldrá a la luz pública en las próximas semanas y condicionará este ahorro.
–¿Hay novedades sobre el Plan de Desarrollo Energético?
–Al margen de la comisión extraordinaria que se constituirá en la segunda quincena de septiembre para analizar la situación, la ciudad lleva meses trabajando en esta materia y se ha contratado un servicio para llevar a cabo un Plan de Desarrollo Energético de la Ciudad. Esta misma semana se nos presentará el borrador de un plan que tiene por objetivos en primer lugar fomentar la implantación del famoso cable de conexión a la red eléctrica de la península teniendo una repercusión directa en cuanto a los apagones que se producen en la ciudad causados o bien por la red de distribución o bien por averías en la central distribuidora. Si hay conexión directa dejarían de producirse. El segundo objetivo es intensificar los sistemas de coordinación de la central distribuidora y de la central de producción de energía que también ha venido siendo uno de los motivos por los que se han provocado las averías en la ciudad como la del 9 de agosto. Por último el tercer objetivo es llevar a cabo una mejora en la red de distribución de la energía eléctrica.
–Una de las mayores controversias de este año ha sido la de la contaminación acústica. ¿Existe ya el mapa de ruidos?
–La ciudad trabaja en una modificación de la ordenanza del ruido, íntimamente relacionada con el mapa de ruidos y que afectará a la ordenanza de espacios ocupados por terrazas. Medio Ambiente, Sanidad y Gobernación trabaja para que en el próximo mes podamos llevar a pleno la aprobación inicial de la modificación de la ordenanza de ruido y la aprobación inicial de la modificación de la ordenanza de terrazas para trazar una cuestión que ha generado polémica y controversia jurídica a partir de la sentencia del TSJA que establecía que la Ciudad debía adaptar la normativa local a la Ley de Ruido.
–¿Se cerrará alguna terraza?
–No quiero aventurarme ahora a hacer diagnósticos de un documento que se está todavía elaborando y en el que trabajamos. El objetivo es intentar compatibilizar los derechos individuales de ciudadanos afectados por zonas de terrazas que en un momento dado pudieran causar molestias con los derechos de los empresarios al desarrollo económico. Hay que alcanzar el máximo nivel de consenso y hay que poner en marcha el plan y mi compromiso es hacerlo en el mes de octubre y en eso nos estamos esforzando.
–¿Cómo le gustaría dejar la Ciudad de cara al próximo responsable medioambiental que la gestione?
–Con un Plan de Residuos en Ejecución y que en el área de consumo de agua se reduzcan los niveles de pérdidas, una ciudad en la que se recicle de manera mayoritaria y en la que las zonas verdes sean respetadas, como ya lo son, por la ciudadanía y disfrutando de la EDAR. En definitiva, una ciudad a los niveles estándares medios de calidad ambiental des resto de las ciudades del país.