Las investigaciones de tráfico de drogas a Italia se cierran con 12 detenidos

La Guardia Civil ha dado por terminada la llamada ‘Operación Astérix’ con la que han erradicado una organización dedicada a introducir droga procedente de Marruecos en Italia.

El número total de detenidos asciende a 12, tanto italianos como marroquíes, y entre ellos está el ciudadano que fue arrestado por agentes del Marítimo de Ceuta con 1.100 kilos de hachís en su embarcación. Aquel arresto se produjo en marzo del año pasado y de hecho, el detenido F.O. ya está cumpliendo condena desde enero, cuando fue condenado por la Sección VI de la Audiencia Provincial de Cádiz en Ceuta. La detención llevada a cabo por agentes de la Comandancia ceutí se ejecutó por petición de la EDOA de Málaga, para hacerlo con mayor celeridad y ante el riesgo de que el italiano pudiera escapar y llegara a introducir el cargamento que se le había ocultado adecuadamente en el puerto de Rincón. Este paso, del que informó El Faro, formó parte de la primera fase del operativo, pero ha sido ahora cuando la Guardia Civil de Málaga ha informado de la finalización de toda la investigación, con el arresto de más personas relacionadas con el trasvase de la droga por tierra, escondida en dobles fondos de vehículos. La Benemérita actuó en coordinación con la Guarda di Finanza y los Carabinieri italianos, después de comprobar que una organización criminal se estaba dedicando a introducir hachís en grandes cantidades en Italia procedente de Marruecos. Había implicados incluso trabajadores portuarios italianos, encargados de recibir y ocultar la droga. En la operación han sido intervenidos los 1.110 kilogramos de hachís que decomisó el Marítimo de Ceuta, dos embarcaciones recreativas, siete vehículos de alta gama, teléfonos satélite, dispositivos GPS, radares y navegadores marítimos, inhibidores de frecuencias, 12.000 euros en efectivo, material para manipulación y envasado de la sustancia estupefaciente y gran cantidad de teléfonos móviles. Tal y como ha explicado el Instituto Armado, la primera de las fases se desarrolló a principios de 2014, desmantelándose una parte de la organización que introducía hachís en Europa por vía marítima. En la segunda fase se ha logrado desarticular la otra parte de la organización, la cual se dedicaba al envío por carretera desde Málaga hasta Italia de importantes cantidades de hachís utilizando para su transporte vehículos dotados con sistemas de doble fondo. Los agentes interceptaron en la autovía A-92 tres coches, dos de ellos actuando de lanzadera, con la misión de detectar y advertir al conductor del vehículo que transportaba la droga de cualquier presencia policial en la vía.

Once condenados, entre ellos el arrestado en Ceuta

F.O., el italiano que fue detenido en Ceuta con 1.100 kilos de hachís, fue condenado por la Audiencia a 4 años y medio de cárcel por su implicación en un delito contra la salud pública. Tras jornadas de juicio en las que defendió su inocencia, dibujándose como una especie de cabeza de turco alejado de la figura de un pasador de hachís a gran escala, la Sección VI de la Audiencia Provincial de Cádiz en Ceuta le condenó ante la presencia de pruebas suficientes, a pesar de que el italiano llegó incluso a dudar del atestado que había firmado la Guardia Civil situando su detención en aguas jurisdiccionales españolas y no al contrario como mantuvo hasta el final el acusado. Así lo narró durante varias ediciones El Faro, con motivo de la celebración del juicio oral que tuvo lugar en el máximo órgano judicial en la ciudad. Los pasos seguidos el 26 de febrero de 2014 por F.O. no eran ajenos a las fuerzas de seguridad italianas. Desde hacía tiempo sospechaban de la introducción de cantidades elevadas de hachís procedentes del norte de África con destino a Italia. La cooperación internacional cobró forma cuando las autoridades italianas informaron a la Policía Judicial de Málaga de la salida del hachís, abortando la escapada Ceuta.