Ceuta quedó aislada el 24 de mayo del agotador juego de pactos y alianzas en ayuntamientos y comunidades autónomas que traía adosada la augurada defunción del bipartidismo. El intercambio de cromos en el resto de España entre los dos grandes partidos –PP y PSOE– y los dos nuevos invitados a la fiesta –Ciudadanos y Podemos– ha pasado de largo por la ciudad, abonada desde 2003 a las mayorías absolutas y, por lo tanto, a gobiernos monocolores. Quizás por eso el único morbo político en juego en estos 20 días transcurridos desde el 24M ha gravitado en encontrar respuesta a la incógnita sobre el nombre y apellidos –y la sigla del partido– de quien ocupará algo tan aparentemente insustancial a los ojos del ciudadano como la Vicepresidencia Segunda de la Mesa Rectora. No opina lo mismo la oposición, consciente de que hoy tocará, por fin, la única cuota de poder a su alcance que dejaba libre la ajustada mayoría absoluta del PP, la misma que era monopolizaba hasta ahora por la hegemonía matemática de su amplia bancada. Aquellos tiempos de 18 diputados permitían fragmentar el voto a los vencedores en las urnas y garantizarse los dos asientos que flanquearán a Vivas durante la legislatura desde la tribuna, pero los nuevos tiempos han obligado a los populares a ceder el segundo de ellos. Una victoria simbólica para el resto de formaciones, que ven la posibilidad de hacer sonar su voz en cuestiones trascendentales como el orden del día de los plenos o las peticiones de comparecencias. El misterio se desvelará hoy en el tercer capítulo del orden del día, pero las informaciones que circularon a última hora de ayer reducen la incógnita ya a mínimos. El PSOE confirmaba anoche, casi a las 23:00, que la nueva ronda de conversaciones iniciada con todas las fuerzas políticas abría la puerta a convertir a su candidata, Mayda Daoud, en voz de la oposición si hoy lograba hacerse con la Vicepresidencia Segunda de la Mesa. Esa posibilidad será realidad, porque fuentes de Caballas ratificaban minutos después a El Faro que el acuerdo entre ambas formaciones estaba cerrado. Traducido, el PSOE aceptaba la oferta lanzada por la coalición de Mohamed Ali hace días para que el cargo en liza, fuera de una u otra formación, sirviera para representarlos a todos. El pacto incluye una posición común, en forma de protocolo de colaboración, que incluye entre otros puntos reuniones periódicas entre ambas fuerzas o posturas idénticas en las atribuciones de la vicepresidenta segunda. Ese acuerdo entregará esta mañana a Daoud al menos ocho votos: los cuatro de su formación, el PSOE, más los cuatro de Caballas. La tercera fuerza en liza, el MDyC de Fatima Hamed, cumplió anoche con lo anunciado el jueves y no desvelará hasta hoy la posición debatida y aprobada en su Comité Ejecutivo. Salvo sorpresa mayúscula todo parece indicar que el partido, la gran sorpresa de las elecciones del 24M y que debuta en la Asamblea con tres diputados, no se sumará a ese frente PSOE-Caballas y se votará a sí mismo. El juego de alianzas se conocerá cuando, tras la toma de posesión de los 25 diputados y el nombramiento oficial de Vivas como presidente, cada uno de los representantes de la Cámara escriba en un papel el nombre de su opción para ocupar las dos vicepresidencias. Los dos con más respaldos se harán con el botín. De lo anunciado en los últimos días por los líderes de los distintos partidos había ya parte del desenlace anunciado. Lo que ya se conocía De las cinco formaciones que hoy se sentarán en la Asamblea, algunas habían levantado ya sus cartas antes. PSOE y Caballas, por contra, esperaron hasta el último minuto. El PP, por boca del propio presidente Vivas, había aclarado este jueves que no dividirá sus votos y que apoyará en bloque, con sus 13 diputados, a Rocío Salcedo como vicepresidenta primera, con lo que su puesto en la Mesa está asegurado. El PSOE, por coherencia, estaba obligado a cumplir lo que José Antonio Carracao reclamó días antes de su adiós: votarse a sí mismo, sumar cuatro sufragios y esperar a que el resto de la oposición haciera lo propio para empatar a la misma cifra con Caballas y que la diferencia de algo más de 200 votos que logró sobre los de Mohamed Ali el 24M les entregase el ansiado sillón. Finalmente no fue así y hoy contará con los votos explícitos de la coalición de Ali y Aróstegui. Ciudadanos también lo tenía claro, al menos hasta ayer: Javier Varga se decantará por sí mismo y esperaba un respaldo del resto de la oposición que, visto el pacto suscrito ayer por socialistas y Caballas, es una quimera. Salvo sorpresa mayúscula, las Vicepresidencias tienen ya nombre y apellidos: la primera para Rocío Salcedo (PP), exviceconsejera de Educación, y la segunda para la debutante Mayda Daoud, ahora voz de la oposición.