Esta Prueba de Acceso a la Universidad tiene sabor a despedida después de 40 años de historia. La LOMCE prevé sustituir este examen por la reválida el próximo curso.
Hasta 304 alumnos, según la Universidad de Granada (UGR), se someten a la Prueba de Acceso a la Universidad desde ayer y hasta mañana en el Campus Universitario. Los exámenes comenzaron con la Fase General, es decir, aquellos en los que coinciden de forma mayoritaria los estudiantes, como son el comentario de texto relacionado con la lengua castellana y la literatura II; Historia de la Filosofía; Historia de España y la jornada finalizó con Idioma Extranjero.
Una Selectividad con sabor a despedida después de 40 años de historia. “Es la última que tenemos en el formato que conocemos”, explicó Juan Luis Benítez, responsable de sede en Ceuta, “ya que con la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) se supone que entrará la reválida”.
El director de la Unidad de Orientación Académica de la UGR señaló que la idea es que los alumnos sigan haciendo una prueba selectiva, aunque no se llame Selectividad, “y tendrán que ir haciendo unos exámenes tanto de asignaturas troncales como de optativas y específicas”. No obstante, apuntó Benítez, aún están a la espera del borrador del Ministerio de Educación que diga cuáles son los contenidos de los que se van a examinar los alumnos que este año están en primero de Bachillerato.
Un aspecto positivo que Benítez encuentra en la nueva reválida es el hecho de que, la nota que estos estudiantes obtengan, “dará acceso a todas las universidades nacionales”. Ahora mismo, la Selectividad “solo sirve para el Distrito Único Andaluz –incluidas Ceuta y Melilla– y los alumnos tendrán más opciones porque con un único examen disponen de todo el territorio nacional para escoger universidad”.
Repasos de última hora, pocas horas de sueño y estrés fueron la nota dominante ayer por la mañana. Los hubo que afrontaron los exámenes nerviosos: “Se me han pasado al ver el primer examen, pero ahora tengo Filosofía y no sé qué me va a caer”, indicó Sandra Murcia. Otros, seguros de sí mismos: “Han puesto justo un texto periodístico; mejor imposible”, reconoció Sara Casas. Y los hay que se sienten afortunados porque no tendrán que hacer la reválida: “El año que viene van a experimentar un poco, por así decirlo, y no se sabe todavía qué harán”, aseguró la aspirante Blanca de la Borbolla.
Los alumnos van a por todas para sacar la nota que les permita matricularse en los estudios que han elegido. A partir del jueves, podrán disfrutar de su último verano antes de empezar la universidad.