La Ciudad, que dio por extinguido el incendio a las 21h, cree que al Ejército “se le fue de las manos”.
La superficie arrasada por el fuego declarado el lunes por la mañana en el campo de tiro de la Legión, al pie del Monte de la Tortuga, supera las 30 hectáreas y podría llegar a las 35, según las estimaciones realizadas por el portavoz del Gobierno local, Jacob Hachuel, quien comparó la magnitud de este incendio con el que se registró en el Arroyo de Calamocarro en julio del pasado año.
Hachuel, por otra parte, también ha avanzado que existe el “compromiso formal” de la Comandancia General de Ceuta de repoblar la zona afectada en cuanto lo permita la propia naturaleza y ha subrayado que, aunque las causas del incendio “están claras” es necesario conocer con exactitud qué pasó “para que al Ejército se les fuera de las manos”, subrayó. El portavoz prometió que la responsabilidad de lo ocurrido “no terminará en un cajón” y que se está a la espera del informe que sobre el incendio elabore el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil, “que está estudiando la situación, aunque parece claro que hay una relación causa-efecto entre los ejercicios que estaban haciendo los militares y el fuego. Eso parece fuera de toda duda”.
De hecho, Hachuel explicó que, “desde el primer momento”, la Comandancia General ha manifestado su decisión de hacerse cargo de la repoblación forestal “y así se lo ha manifestado el general Sancho Sifre al presidente de la Ciudad y le dijo que él mismo iba a presionar ante las instancias que fueran necesarias para que esto se hiciera lo antes posible”, añadió. La Ciudad tampoco descarta que los costes del dispositivo termine abonándolos el Ejército. “Desde luego el que provoca el incendio debe terminar pagando”, afirmó, “pero en este momento no nos hemos puesto a echar cuentas de cuanto puede haber costado esto, aunque se verá absolutamente todo”.
Lo que también confirmó el consejero es que la Legión tenía autorización para la realización de los ejercicios, que eran rutinarios, en el campo de tiro junto al Monte de la Tortuga. En una de sus laderas se inició el fuego cuando se realizó un disparo con munición inerte, que terminó explotando y provocando las llamas, que los militares intentaron sofocar con sus medios, pero debido al viento de poniente reinante en el Estrecho y la sequedad del terreno se propagó rápidamente, tanto que en cuestión de minutos se extendió hacia otra zona colindante . “ El Ejército tiene unos protocolos de posibles incidencias de incendios forestales cuando se hacen prácticas, lo que hay que determinar ahora es si ese protocolo se cumplió, aunque los protocolos llegan a un punto y nunca se sabe a partir de qué momento ese protocolo no es capaz de responder a la incidencia, como parece que fue el caso, aunque en el momento que percibieron que con sus propios medios no iban a poder hacerse con la situación pidieron el auxilio de la Ciudad”.
El incendio quedó bajo control y extinguido oficialmente después de la reunión mantenida a las 21.00 horas por responsables de los diferentes servicios que forman parte del dispositivo. Anoche permaneció vigilante en la zona un retén preventivo de Bomberos por si fuera necesaria alguna otra intervención.
Ese retén lo conforman 10 efectivos del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS), que manejan 2 autobombas y 2 vehículos ligeros y, además de esto, una dotación similar está alerta en el Parque de Bomberos como reserva.
La situación estaba ya controlada en torno a las 7 de la mañana del martes, unas 20 horas después de declararse el fuego, y se rebajó del nivel 2 de alerta a nivel 1 a las 14.30h. Una vez decretado el nivel 1 de alerta, la UME inició anoche su repliegue escalonado esta noche, si bien parte de sus efectivos se quedarán en Ceuta hasta mañana; y los medios aéreos se retiraron una vez agotado el tiempo operativo inicial, a mediodía, después de que el hidroavión FOCA 30, del Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente, realizara varias descargas de agua para refrescar el suelo Una vez que la alerta ha desaparecido se prevé que un dron sobrevuele la zona incendiada con el fin de poder determinar con más exactitud la masa forestal que se ha perdido.
Un retén de Bomberos releva a la UME
Una vez rebajado el nivel de alerta y que la UME comenzó a replegarse en la tarde noche de ayer, fueron los Bomberos los que volvieron a hacerse cargo de la situación, en ese caso, con un retén y ya únicamente para seguir refrescando el terreno. La retirada de la UME, como suele ser habitual, fue paulatina y la última brigada que estuvo trabajando fue sustituida por efectivos del SEIS, “con todas las garantías, aunque con todas las reservas también, de que el fuego está extinguido”. En total, en las tareas de extinción han participado por parte de los Bomberos, hasta 52 efectivos.
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