La finalización del Auditorio de la manzana del Revellín se encuentra a escasos de meses de concluir y ya se han iniciado los trámites que culminarán con esta obra tan demandada por los ciudadanos. Y es que en un plazo de entre diez y quince días, se procederá a la contratación de la séptima fase de este proyecto, el relativo a los acabados del inmueble, así como a su equipamiento.
La contratación, en este caso, es una confirmación de la obra total de la manzana del Revellín que ya fuera adjudicada a la empresa Corsán-Corviam.
Esta séptima y última fase, que dará como resultado la culminación del Auditorio, está presupuestada en 7.362.630,24 euros, de los cuales algo más de 2,5 corresponden íntegramente al proyecto escénico, que comprende tanto la finalización de la obra como el mobiliario, en un plazo de ejecución de cinco meses. En esta fase se acometería la instalación de la tarima de madera del escenario, el acabado de las paredes con un acabado ondulante de cara a hacerlo más estético o el acabado de la urbanización.
A todo esto se sumaría el equipamiento del Auditorio, desde los sillones de los músicos y del público, hasta los atriles, micrófonos o el telón. Al contrario de lo que suele aplicarse en otro tipo de proyectos, en este caso la adjudicataria de la obra es también la encargada de instalar el mobiliario. Esto es así, dado que el equipamiento requiere de cierta instalación que no es necesaria en otro tipo de proyectos.
De cumplirse los plazos de la contratación, la ciudad podría disponer del nuevo Auditorio entre finales del mes de enero y principios de febrero.
El edificio cuenta con un aforo de 615 plazas, de las cuales un 20% (aproximadamente 120), está reservado a los palcos. Además, dispone de dos cabinas que pueden ser empleadas como zona de traductores en convenciones de carácter internacional o incluso como palco privado.
A ambos lados del escenario se han habilitado sendas torres de cajas escénicas, que incluye la instalación de la iluminación y del resto de elementos necesarios para el desarrollo escénico.