La consejera de Fomento, Susana Román, se reunió ayer en Madrid con responsables de los ministerios de Fomento y de Hacienda y Administraciones Públicas para continuar definiendo los detalles del proyecto de remodelación y regeneración urbana de la frontera y su entorno.
En concreto, en la reunión han participado responsables de la Dirección General de Carreteras y de su Demarcación Sur y de la Subdirección General de Estudios y Proyectos, dependientes del Ministerio de Fomento, y de la Dirección General de Fondos Comunitarios, del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, además de la Sociedad Estatal Ingeniería y Economía del Transporte (Ineco). Previamente, la consejera se ha reunido también con representantes de Sepes (Entidad Pública Empresarial de Suelo).
En la reunión, la consejera y los responsables del Ministerio han acordado realizar un trazado “más ambicioso” que el previsto. “Nos habíamos planteado inicialmente desdoblar la carretera, con dos carriles en cada sentido, pero ahora pretendemos que sea más amplio para que tenga capacidad para dar respuesta a situaciones no previstas”, explicó Susana Román.
La ejecución de este proyecto, que diseñará Ineco, supondrá la eliminación de todos los elementos urbanísticos situados en uno de los laterales de la carretera, ya sean viviendas o locales comerciales. De este modo, los márgenes del trazado quedarán libres de inmuebles.
Plazos
Con el objetivo de acortar los plazos, la Ciudad tratará de evitar el proceso de expropiación, que conlleva una larga tramitación administrativa. Para ello, intentará alcanzar acuerdos con cada uno de los propietarios de las viviendas y de los locales ofreciéndoles un realojo en la misma zona, que en el caso de las casas sería en viviendas públicas. Este proceso se desarrollará de acuerdo con el censo de inmuebles que ya tiene elaborado la Consejería, en el que se detalla cada uno de ellos.
Para la financiación de la obra se utilizará el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) que gestiona la Administración General del Estado, y que junto con la cofinanciación supondrá una inversión de casi 20 millones de euros.
La Ciudad y el Ministerio de Fomento continuarán trabajando para coordinar todas las actuaciones que implican este ambicioso y complejo proyecto, lo que implica también ir de la mano del Ministerio del Interior, que es quien se encargará de la remodelación del puesto fronterizo. “No podemos hacer el trazado de espaldas al proyecto de la frontera, aunque en teoría sean actuaciones independientes”, explicó Susana Román.
La intención es que el proyecto de reforma de la carretera nacional esté listo entre finales de 2014 y principios de 2015.
A partir de entonces será cuando desde el propio departamento ministerial se pueda producir la licitación de la obra, con lo que se considera que el comienzo de los trabajos podría ser en un año aproximadamente.
Esta segunda reunión es una continuación de la que ya tuvo lugar la semana pasada, concretamente el jueves y en la que participaron los mismos representantes de ambas administraciones, aunque con la salvedad de que entonces no estuvo ningún integrante del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas y más concretamente de la Dirección General de Fondos Comunitarios. Se confía en que habrá nuevos contactos para después de las vacaciones veraniegas de agosto.