El baloncesto es el segundo deporte con más licencias federativas en España, superando las 350.000. En cuanto a resultados, es sin duda el que ha conseguido más títulos en todas las categorías en lo que va de siglo XXI, y estamos segundos del Ranking Mundial por detrás solo de los todopoderosos EE UU.
Sin embargo, practicar este deporte en Ceuta no es nada sencillo. A los vaivenes federativos, donde se intercalan directivas voluntariosas con otras de nefasta gestión, se une un desinterés total del Gobierno de nuestra Ciudad por apoyar a los pocos equipos que luchan por mantenerse en la competición. Los que deciden cruzar el charco y jugar en la liga provincial de Cádiz, con el objetivo de seguir progresando y tener una competición fuerte donde mejorar el nivel, se ven obligados, en la mayoría de los casos, a jugar como local en Algeciras, ante la negativa de los equipos de Cádiz a desplazarse hasta nuestra ciudad. Pese a todo, este año ya son cinco los equipos que han conseguido dar el salto, con unos resultados más que aceptables, algunos incluso liderando la clasificación de su grupo.
Aunque las comparaciones son odiosas, a veces también son sonrojantes. En una Ciudad donde prácticamente todo está subvencionado, una hora de alquiler de pabellón cuesta más del doble que en nuestra vecina Algeciras, y muchos equipos tienen que utilizar las pistas del Parque Juan Carlos I (La Marina) para poder entrenar y jugar de vez en cuando algún partidillo. En lo que se refiere a Melilla no podemos ni siquiera compararnos. Con un equipo puntero en LEB Oro, el Gobierno de la Ciudad aporta ¡¡¡800.000 Euros!!! Para este deporte. Mientras, en Ceuta, la totalidad del montante que recibe el Baloncesto entre Clubs y Federación asciende a 47.000 euros importe que permanece constante desde hace cuatro años, cuando existía solo un equipo jugando en la Provincial de Cádiz.
Por seguir haciendo comparaciones, los cinco equipos reciben la misma subvención para toda la temporada que el importe destinado por la Ciudad a la organización de las pruebas “Cuna de la Legión” y “El desafío de los 300”, pruebas realizadas por primera vez en 2016, lo que demuestra que, cuando hay voluntad, se consigue la partida presupuestaria para apoyar un cualquier prueba deportiva.
Bueno, pues en las pistas de La Marina hace ya años que falta una canasta, con lo cual es imposible que dos equipos entrenen a la vez.
Además, son muchos los aficionados que utilizan las instalaciones simplemente por practicar un poco de deporte, siendo normal que en los días de buen tiempo se encuentren todas las canastas ocupadas y que haya gente esperando que alguna se quede alguna libre.
La última “piedra” en el camino del baloncesto ceutí es la ocupación de estas pistas por un evento de la Obra Social de La Caixa, que ha impedido continuar con los entrenamientos a varios equipos. ¿No hay otro sitio en la explanada para ubicar la exposición que la única pista completa de baloncesto existente?
Nuestros equipos están preparando torneos fuera, con los desplazamientos pagados íntegramente por la aportación de los padres de los jugadores, y durante un tiempo no podrán entrenar los fines de semana.
Desgraciadamente, según lo visto en las redes sociales, no somos los únicos perjudicados, los practicantes del Hockey se encuentran en la misma situación. Ante esta discriminación no nos queda más remedio que ejercer nuestro “derecho al pataleo”, al menos denunciar y poner en conocimiento de todos los ceutíes la poca colaboración recibida de la administración local a los deportes que no son el fútbol, el único que parece existir para nuestros gobernantes.
Creo que no pedimos demasiado, un lugar para entrenar y adaptar las subvenciones para que cualquier joven ceutí pueda ser integrante de un equipo de baloncesto en categoría provincial, ya que hasta ahora solo lo pueden practicar aquellos que sus padres tengan dinero suficiente para costear una parte importante de los desplazamientos. Señores políticos de nuestra ciudad ¿No les parece que es algo razonable?