La ola de calor ya ha pasado, y por Ceuta también se ha dejado notar sobre todo al final, si tenemos en cuenta las temperaturas alcanzadas, por ejemplo, en Melilla o en puntos de la provincia de Cádiz donde se han superado con holgura los 40 grados centígrados. Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), la razón que ha permitido a Ceuta no tener que sufrir un extenso fin de semana de calor asfixiante ha sido “el régimen y fuerza del viento”, que ha refrescado o secado el ambiente.
En este sentido, las primeras alertas por la ola de calor se dieron el viernes; sin embargo, Ceuta escapaba de ellas. Para entonces, en la ciudad soplaba viento de componente sur y rachas de levante, que tienen cierto recorrido marítimo y refrescan el ambiente. Dicha jornada la temperatura máxima alcanzada en Ceuta, según AEMET, fueron 29 grados centígrados a las dos y media de la tarde. Sin embargo, las condiciones empezaron a cambiar con la llegada de la noche, abriéndose las puertas para la entrada de los rigores de la ola de calor.
A las dos de la madrugada del sábado, Ceuta situaba su mínima en los 23 grados centígrados, alcanzados sobre las tres de la madrugada, y lo hacía con un nivel de humedad del 90 por ciento. A partir de entonces, el viento empezaría a perder fuerza e incluso a dejar de soplar durante horas, lo que hizo subir el termómetro a medida que avanzaba la jornada del sábado.
De esta manera, sobre la una de la tarde ya se habían alcanzado los 32 grados, un dato que ya superaba en diez grados la máxima obtenida veinticuatro horas antes. Con la llegada de la tarde, empezaba a soplar un viento de poniente de marcado carácter terrero, es decir, que procede de tierra firme, lo que incrementa la sequedad del mismo. Una sensación que alcanzó su punto álgido pocos minutos antes de las seis de la tarde, cuanto el termómetro superó los 38 grados. Pero lo peor aún estaba por llegar, porque un viento seco y casi ardiente decidió complicar la noche a los ceutíes. Sobre las dos de la madrugada del domingo el termómetro superaba por poco los 35 grados, un dato que quedará para los anales de los datos climatológicos de Ceuta. Según los datos históricos de la AEMET, el récord se había logrado el día uno de agosto de 2006, cuando el termómetro marcaba casi 26 grados centígrados a las cinco de la madrugada, diez grados menos que el dato alcanzado ayer domingo.
Pero el calor no ha dado tregua desde entonces. Al cierre de esta redacción el mercurio no había superado durante todo el domingo los 35 grados, por lo tanto, el dato alcanzado ayer a las cinco de la madrugada hace historia pulverizando los récord anteriores. Un hecho que corrobora la temperatura mínima dominical, que se alcanzó a las ocho de la mañana, con 26,1 grados. Lo mejor de todo es que las predicciones meteorológicas dan un respiro en lo que al calor se refiere, desde hoy lunes cesa en intensidad el termómetro con máximas que rondarán los treinta grados.