El 50,2% de los hogares de las barriadas Príncipe Alfonso, Príncipe Felipe, Loma Colmenar y Benzú, el Distrito 6 de la ciudad autónoma, está en una situación de exclusión (con 2 o más analfabetos o sin estudios) o vulnerabilidad (uno o más con ese perfil formativo) educativa, según los datos del informe ‘Las condiciones de vida de la población de Ceuta 2013’, elaborado por ‘Sociópolis’ para la Consejería de Asuntos Sociales y a cuyo contenido íntegro ha tenido acceso ‘El Faro’.
La ratio de familias en un nivel de integración educativa (con ninguna persona analfabeta o sin estudios) se sitúa, por tanto, en esa parte de la periferia, en un 49,8%, exactamente la mitad que, por ejemplo, en la zona centro (Distrito 1), donde alcanza el 99%. En los Distritos 3, 4 y 5 esa tasa no baja del 73%, mientras que en el número 2, el del Monte Hacho, retrocede hasta el 56,7%. El porcentaje de hogares en exclusión educativa en esta zona (23,9%) es, de hecho, casi tan alto como en el Príncipe (27,8%).
La pobreza económica no sólo está ligada, así, directa o indirectamente a la privación material y a la baja intensidad de trabajo, como refieren los autores del análisis, sino también a la educativa. El Distrito 6 concentra el mayor porcentaje de hogares y personas “en riesgo de pobreza o exclusión social” (un 70% de su población lo está), por lo que “la escasez de bienes duraderos, el desempleo crónico y la falta de recursos económicos de las familias en esta zona de la ciudad la hace especialmente vulnerable ante periodos de crisis o recesión económica”.
La exclusión educativa es la segunda menos frecuente (un 8,7% de los hogares de toda la ciudad lo están) por detrás de la familiar. La que presenta una ratio más elevada es la del ámbito ambiental: el 53% de las familias de Ceuta vive en entorno con problemas de ruido, suciedad, contaminación o vandalismo, en total más de 12.000 hogares.
La importancia que se da al factor educativo ha caído, sin embargo, espectacularmente desde 2007. Ahora el principal problema para el conjunto de los ceutíes es el desempleo (8 de cada 10 familias pobres lo perciben como el mayor obstáculo que se encuentran para progresar). Hace seis años, una de cada tres familias pobre de Ceuta (el 30%) señalaba a sus “carencias o lagunas en el terreno educativo” como su mayor déficit para mejorar. Ese porcentaje ha caído ahora por debajo de la mitad (14,5%) en el caso de las familias pobres y no llega ni al 10% en el conjunto de las familias de Ceuta.
Según el diagnóstico de ‘Sociópolis’, “en general las percepciones sobre la falta de promoción que sufren las familias se basan principalmente en variables externas que no dependen de su actitud o disposición para mejorar, principalmente el paro y la injusticia social, un concepto poco concreto”. En el mismo sentido, cae la importancia que se atribuye “a variables personales” como las formativas.
Ahora mismo se señala más a “la edad” o la existencia de deudas “continuas y acumuladas” como lastres más pesados que el nivel educativo alcanzado.