La Jefatura en el Príncipe trasladará la inseguridad a otras barriadas

Mientras la Delegación del Gobierno tiene planteados los proyectos que va a acometer en materia de seguridad, la voz social, al menos la de algunos sindicatos, se le vuelve en contra. Y lo hace en la representatividad que tienen en las dos fuerzas policiales con más peso: la Policía Nacional y la Benemérita.

Los primeros, por la ubicación de la futura Jefatura Superior en el corazón del Príncipe. Una idea que tiene ya el visto bueno del ministro del Interior, Jorge Fernández, y por la que peleará el delegado del Gobierno en esta legislatura. El Sindicato Unificado de Policía (SUP) no ha ocultado su oposición y ahora es Andrés Carrera, su secretario general, el que explica por qué. “Es una incongruencia lo que quieren hacer”, señala a ‘El Faro’. Pone las competencias encima de la mesa. Si la Policía Nacional las tiene en el casco urbano, “¿cómo van a mandar nuestra sede al extrarradio?”, se pregunta el sindicalista. Es el cuento de nunca acabar o el de los papeles cambiados: “¿Por qué se manda a la Guardia Civil al centro y a nosotros a la periferia?”, cuestiona.
¿Cuestión de seguridad? Carrera planta cara al delegado del Gobierno. Muy al contrario, a juicio del sindicalista llevar la Jefatura al Príncipe ni va a solucionar las cosas ni va a hacer que mejore la seguridad en el barrio. “Los problemas que hay allí no son policiales. Ahí hay que adoptar soluciones sociales, de infraestructuras, de ayudas...”, apunta Carrera. “Después de eso habrá que pensar en qué hacer con la Jefatura, en dónde ponerla. Los problemas policiales no son exclusivos del Príncipe, se dan en todos los puntos de la ciudad”, añade.
Carrera lanza una advertencia. Como líder del SUP, el sindicato con más peso en la Policía Nacional en Ceuta, no le duelen prendas en advertir que implantando la Jefatura en la barriada ni mejorará la seguridad ni ayudará a que el resto de Ceuta esté más segura. “A lo mejor lo que consiguen es que traslademos más delincuencia al centro de la ciudad”, añade. Si se sospecha de la existencia de depósitos de droga en la barriada, lo que sucederá es que la delincuencia se extrapolará a otras zonas que pasarán a convertirse en núcleos duros. No son estimaciones, sino denuncias fundamentadas. Con los controles impuestos durante mes y medio para blindar el acceso al Príncipe, negocios como el de los culeros se trasladaron a otras barriadas. Así que ni se puso solución a la inseguridad sino que se sólo se provocaron traslados. Carrera se explica. Construir una Jefatura y mantener la actual del Paseo de Colón, tal y como propone la Delegación del Gobierno, va a arrastrar más pérdida de personal que se dedicará únicamente a la custodia de los edificios. “Esto sólo va a provocar el efecto de distracción porque habrá que tener policías solo para vigilar los edificios y esto supone un desgaste de 30 policías para cada edificio”, añade. “¿En qué ciudad de España se ha construido una Jefatura en la zona que es considerada como foco de delincuencia para erradicarlo?”, se pregunta.
El SUP, contrario a los planteamientos de la Delegación, insiste en que la futura Jefatura Superior debe ubicarse en cualquier otro lugar de la ciudad menos en el Príncipe. “Ni los vecinos van a ir allí a denunciar, ni eso va a servir para mejorar nada en la barriada”, advierte. Pone por delante la situación de la comisaría de Los Rosales, convertida en una especie de oficina a la que nadie acude a denunciar y que se convierte en un lugar que debe ser custodiado por los agentes. “Tampoco sabemos, con los planes que tiene el Gobierno, qué pasará entonces con esta comisaría... si se cerrará o no”, añade Carrera. Para el SUP se está mareando la perdiz sin coger el toro por los cuernos en la problemática que se da en la barriada. Instalar allí el centro operativo forzará a los agentes a tener que trasladarse al barrio para trabajar, provocando un mayor control sobre los vehículos particulares que utilizan. “Si ya nos queman coches, ahora estaremos expuestos a que se vean mucho más”, añade.

El SUP unido a las tesis del anterior jefe superior

Lo que ahora mantiene el SUP es reflejo de las tesis que ante el anterior delegado del Gobierno, José Fernández Chacón, defendía el anterior jefe superior de la Policía, José Luis Torres. Siempre que se barajaba la construcción de un centro policial en la barriada, el anterior mandatario policial se negaba a su puesta en marcha. Es más, por orden del delegado llegó a elaborar un informe para defender que en la barriada del Príncipe no se producían más delitos que en otras, aunque los que tenían lugar fueran mucho más sonados al focalizarse allí el desarrollo de varios tiroteos.

AUGC recuerda al delegado que “urge más” el traslado y cierre del cuartel de Hadú

A la voz crítica del SUP se suma, por otros motivos, la de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC). Al delegado le salen voces respondonas contra su proyecto de seguridad. Si el SUP está disconforme por lo que a los policías puede afectar, a la AUGC no le parece lógico que en la visita del ministro de Interior todas las miras se centren en la futura instalación de la sede para la Policía mientras “nosotros, los guardias civiles, estamos viviendo en unas condiciones tercermundistas”.
Para la asociación “urge más poner sobre la mesa el cierre del cuartel de Hadú que hablar de la nueva Jefatura”, señala. “El edificio del Paseo de Colón puede ser antiguo, pero aguanta todavía para que los policías trabajen bien. ¿Pero la Comandancia?, ¿ha visto el delegado del Gobierno como está?”. Los familiares de los guardias que allí residen lo hacen en un edificio “que se cae a trozos”, en el que niños pequeños se mezclan con la entrada de detenidos, en el que no hay intimidad, en el que sólo se han hecho pequeñas obras para ‘lavado de imagen’ de una Comandancia que no puede seguir siendo por más tiempo la sede de los guardias civiles. Eso es lo que mantiene la AUGC, que le pregunta al delegado González Pérez si no ha puesto sobre la mesa el estado real de ambas instalaciones para decantarse, rápidamente, por la obra de la Policía. “Llevamos años con un solar en el que se supone que ya debería estar construida la Comandancia y que vemos desierto, parado, sin que nadie se haya preocupado por mejorar la situación”.