Agentes de la Guardia Civil adscritos a la Compañía Fiscal del Puerto hallaron en el interior de un camión a un inmigrante mauritano que constaba como residente en el CETI. El joven estaba oculto en una litera del vehículo y tapado con una manta, cuando fue sorprendido por los agentes en el transcurso de una inspección orientada a vetar el tráfico de inmigrantes y droga hacia la península.
En el momento del registro se procedió a la detención del camionero, acusado de un presunto delito contra los derechos de los extranjeros, aunque a posteriori, tras su puesta a disposición judicial el hombre quedó en libertad. La Benemérita sospecha que el inmigrante se había colado en el vehículo.