{jaimage crop="TC" /}Hasta 18 inmigrantes, en su gran mayoría subsaharianos, fueron rescatados en el día de ayer por la Benemérita y Cruz Roja, en un total de cuatro intervenciones distintas. La más importante fue la llevada a cabo a las seis de la mañana, que se saldó con el rescate de 13 subsaharianos, entre ellos una mujer. Dos del grupo manifestaron ser menores, al igual que hicieron varios de los detectados el pasado fin de semana.
Un grupo de seis subsaharianos entró a nado, ayudados de flotadores. Iba uno más pero éste fue interceptado por las fuerzas de la mehanía. Todos los subsaharianos fueron recogidos entre la lancha de Cruz Roja y Guardia Civil, mientras la ‘Gadir’ rescataba al sexto introduciéndose en aguas marroquíes.
Poco después se procedería al rescate de siete subsaharianos, entre ellos una mujer, que ocupaban una balsa neumática y que fueron detectados a una milla de la playa del Chorrillo.
Las intervenciones no iban a quedar ahí, ya que horas después, pasada la una de la tarde, se procedía al rescate de otros tres nadadores en la playa del Tarajal, que también habían entrado con flotadores. No requirieron traslado al Hospital Universitario pero sí asistencias básicas en el puerto deportivo por parte de voluntarios de la entidad humanitaria.
Estos tres subsaharianos entraron arrojándose al mar a una hora no habitual entre la población subsahariano para intentar el pase, ya que la franja, denominada ‘caliente’, se produce entre las cuatro y las siete de la mañana. Aún así el trío se arriesgó y terminó siendo rescatado inicialmente por Cruz Roja para, después, ser trasladado al puerto deportivo por la Benemérita.
Ya por la tarde se procedía al rescate de una pareja de argelinos que también habían intentado su entrada a nado pasadas las seis de la tarde. Ambos fueron atendidos inicialmente en el puesto de emergencias que tiene Cruz Roja en la playa del Tarajal para después ser entregados a la Guardia Civil.
Todos los inmigrantes fueron trasladados al CETI, en donde se han buscado espacios colocando más literas en los módulos que sirven de habitaciones. Así se ha previsto un plan de actuación para ir acomodando a todos los subsaharianos que vayan llegando en los espacios que se habiliten y en los que dejen aquellos subsaharianos que abandonan el centro de forma oficiosa -escondidos en camiones- o que son trasladados a la península -vía traslado a un CIE o los que se esperan que lo hagan vía acogimiento de otras oenegés-. La situación de Ceuta, con 148 entradas en 11 días, no es del calibre de la registrada en Melilla en donde, además de que la presión es mayor, ya se han tenido que reforzar las medidas de seguridad en el campamento y pedir apoyo logístico al Ejército.