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Agentes educativos, partidos y otras entidades, citadas el martes a las 18.30 horas en la sede de la FPAV
La Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (FAMPA) de Ceuta ha convocado “a todas las entidades que forman parte de la Comunidad Educativa de la ciudad, a todos los partidos políticos con representación en la Asamblea y a otras entidades de carácter social” a participar en una reunión informativa que tendrá lugar el próximo martes a partir de las 18.30 horas en la sede de la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos (FPAV).
El objetivo del colectivo de familias de los estudiantes es conseguir el mayor respaldo social posible para la jornada de “lucha”, de huelga general educativa, que tendrá lugar el próximo 26 de octubre en todo el país contra las ‘reválidas’ que trae consigo el proceso de implantación de la LOMCE y a las que, salvo cambio de rumbo del Gobierno, deberá someterse la próxima primavera el alumnado que termine Secundaria y Bachillerato, en este último caso sin efectos académicos pero sí para el acceso a la Universidad.
Según informó ayer la entidad que preside Mustafa Mohamed en un comunicado a los medios, el llamamiento tiene como objetivo “favorecer el debate y alcanzar una necesaria unidad de acción contra estas pruebas externas que suponen un profundo ataque al sistema educativo”.
La Federación sigue la senda de la Confederación Española de Asociaciones de Padres de Alumnos (CEAPA), a la que está adscrita a nivel nacional, y el Sindicato de Estudiantes, quiere que todas las madres y padres de alumnos de todas las enseñanzas vacíen las aulas el último miércoles de este mes “en un gesto claro de rechazo a las ‘reválidas”.
La FAMPA hace extensivo este llamamiento “a todas las familias de Ceuta” para que tomen parte en la jornada reivindicativa, que finalizará con una concentración en la Plaza de los Reyes a partir de las 19.30 horas.
Para estas organizaciones las evaluaciones externas “suponen un ataque al alumnado porque se ve obligado a jugarse su futuro en una nefasta prueba externa a los centros educativos que puede dejarle sin titulación y sin poder continuar los estudios que merecen y para los que han superado sus estudios para poder continuar”.
“Se pone a las familias ante la situación de ver cómo sus hijos e hijas no pueden continuar su progreso educativo, teniendo derecho a ello, y quedan en una indefensión absoluta por no poder garantizar que dicho progreso se pueda producir y viendo su futuro irse por un desagüe”, amplió la FAMPA, que también opina que las ‘reválidas’ atacan “directamente” al profesorado “desautorizando su función docente y dejando su evaluación continua supeditada a que una prueba externa realizada y evaluada por personas que no conocen a su alumnado confirme o no la evaluación que ellos hayan realizado”.